Gustavo se rebeló contra sus padres, dejó la escuela y se sumergió en el mundo de las drogas desde muy joven. Perdió la perspectiva, sentía que no tenía futuro. Sin embargo, todo cambió cuando él decidió entregarse a Dios.
Toque el Manto Consagrado este viernes, a las 8, 10, 12, 16 y 20 con el obispo Romualdo, en Av. Corrientes 4070, Almagro y sea libre de su sufrimiento.