Bullying parece ser la palabra del momento. Con su origen en inglés, su traducción más sencilla es “intimidación”, y ha sido tema de noticias tenebrosas y diarias. Los efectos de esa práctica pueden significar el fin de un buen desempeño escolar, baja autoestima e incluso perjudicar el futuro de sus víctimas.
Un caso reciente fue el de una joven de 12 años, de Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, Brasil. Por ser de raza negra y adoptada, ella sufrió durante 3 años, en tres colegios diferentes, por la persecución de otros alumnos.
En la última escuela, la madre de la muchacha, Lúcia Helena, de 51 años, afirma que todo empeoró, principalmente después de que su hija se defendió de una agresión y la dirección todavía la consideró culpable. El episodio abatió a la adolescente, que comenzó a decir que preferiría morir que volver a la escuela. En depresión, perdió las pruebas finales y el recuperatorio.
“Ella no quiso salir de casa ni tampoco conversar. Desarrolló una fobia a la escuela. El daño es tan grave que los médicos me recomendaron no dejarla sola, vigilar lo que hace y evitar dejar cuchillos y medicamentos a su alcance. Traté de explicarle (a la escuela) que ella no estaba en condiciones de hacer las pruebas, que estaba bajo los efectos de remedios fuertísimos, pero la escuela fue irreductible”, dice Lúcia.
Problema mundial
No es solo en Brasil que ese mal se extiende y destruye la vida de jóvenes. Prueba de eso es la serie “13 reasons why” (13 razones porque), basada en este tema, fue creada y tiene un estruendoso éxito internacional. En la serie, una joven es maltratada por ser considerada “fácil” por sus compañeros. Ella sufre ofensas y persecuciones, hasta que decide suicidarse. La serie levanta una discusión sobre problemas importantísimos que deben combatirse, pero, lamentablemente, no presenta una solución para ninguno de ellos.
Motivos para vivir
Aprovechando la repercusión de la producción, la Fuerza Joven Universal (FJU) comenzó la campaña “13 razones para vivir”, en la que divulgó imágenes con frases motivacionales y de apoyo para los que sufren una situación parecida a la de la trama.
“La FJU siempre va en contramano del mundo y, al enterarnos de una serie que divulga motivos para morir (aunque no sea intencional), nosotros tenemos la obligación de mostrar razones para vivir. Muchos jóvenes están pasando las mismas situaciones de la protagonista y pueden ser incentivados a suicidarse”, dice el obispo Marcello Brayner, coordinador del grupo en Brasil.
Él afirma que la campaña de la FJU pretende ayudar a jóvenes a superar traumas, a descubrir su verdadero valor y a tener personalidad para no dejarse influenciar por la opinión de otras personas. “Todo es posible cuando se conoce al Autor de la Vida. Nosotros podemos ayudar.”
¿Quiere saber cómo? Acceda a la página oficial de la FJU.
Comparta esta noticia en las redes sociales.
[related-content]