La Avenida Paulista es una de las más conocidas en todo Brasil. A lo largo de su extensión es posible encontrar productos artesanales, museos e incluso universidades.
Desde octubre del año pasado, la avenida se cerró al pase de vehículos todos los domingos, lo que la convirtió en un espacio para caminatas y de ocio para los visitantes. Esto la volvió aún más transitada.
Pensando en esto, un grupo de 120 levitas (voluntarios del Templo de Salomón), fue hasta el lugar a fines del mes de enero, para llevar la Palabra de Dios a los más necesitados.
La fotógrafa Adriana Inácio Ferreira, de 44 años, y el empresario Ezequiel Camilo Ferreira, de 58 años, fueron los organizadores de la acción. Según Adriana, la receptividad fue muy grande. Muchas personas querían saber quiénes eran estos voluntarios que tenían rosas blancas en las manos. “Encontramos a una mujer que tenía ganas de suicidarse debido a tantos problemas. Conversamos con ella y le mostramos que existe una solución para todo lo que estaba atravesando”, contó la fotógrafa.
En total, más de 6 mil personas fueron invitadas para participar de las reuniones que diariamente se realizan en el Templo de Salomón, en el barrio de Brás. Todas esas personas escucharon lo que los voluntarios tenían para decir y las mismas también les contaron a los levitas sus angustias y se desahogaron con ellos. Para Adriana, esto hizo que cada voluntario saliera de allí con la certeza de haberles mostrado una solución a personas que necesitaban un apoyo.
Ezequiel contó que el grupo de voluntarios se encontró con personas que nunca visitaron el Templo de Salomón. Por lo tanto, el destacó la importancia de la evangelización en la Avenida Paulista. “Haremos por lo menos una evangelización por mes, porque aún hay muchas personas que necesitan ayuda”, concluyó el empresario.
¿Quiénes son ellos?
Los Levitas voluntarios ayudan al buen funcionamiento de las reuniones del Templo de Salomón, reciben a las personas que participarán de las reuniones y, además, son los responsables de orar por todas ellas.
La Universal tiene varios proyectos sociales y, a través de sus voluntarios, actúa en varios sectores de la sociedad con el objetivo de llevar una ayuda emocional, psicológica, material y, sobre todo, espiritual a quienes lo necesitan, en asilos, orfanatos, hospitales, cárceles, barrios, entre otros lugares.
Proyecto Rahab (ayuda a las mujeres víctimas de violencia doméstica).
Proyecto T-Amar (apoyo a adolescentes embarazadas y madres solteras).
Proyecto Leer y Escribir (alfabetización de jóvenes y adultos).
Ángeles de la Madrugada (Ayuda a las personas que viven en situación de calle).
Grupo Caleb (Incentivo y ayuda a las personas mayores).
Fuerza Joven Universal (acciones con los jóvenes).
¿Se ha identificado con algunos de estos proyectos? Entonces, no pierda más tiempo, busque una Universal más cercana a su domicilio y obtenga más información sobre cómo ser un voluntario. No se olvide: “Más bienaventurado es dar que recibir.” (Hechos 20:35)
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