A los 26 años de edad, Chris Weir le propuso casamiento a Emma Stokes, también de 26 años. La pareja inglesa sería una más entre millones de novios que se unen en matrimonio todos los años si no fuera por el momento en el que Chris le hizo el pedido: Emma corría riesgo de muerte.
La británica, que es bailarina, pasaba por el momento más difícil de su vida. Luego de la muerte de su abuela, la joven perdió el control de su vida. Ese problema psicológico, sumado a una rutina de 6 horas de baile todos los días, resultó en una dieta desequilibrada, resumida a pequeñas porciones de vegetales. La consecuencia fue la pérdida de casi 1 kilo por semana.
El peso de Emma bajó de 58 a 41 kilos en pocos meses, lo que le generó problemas físicos (vea la imagen abajo). Y la depresión vino cuando esos problemas se unieron a los psicológicos.
“Literalmente, me arrastraba fuera de la cama, daba una clase, ponía la alarma y volvía a dormir. Después lo repetía”, cuenta la joven.
Su vida dejó de existir en aquel período pero el amor de Chris no. Él la acompañó en las diversas incursiones de la familia de su novia al médico y estuvo presente cuando ella estaba internada en estado crítico. Cuando salió, todavía lejos de estar rehabilitada, Emma recibió un pedazo de papel titulado “Razones Para Vivir.”
El mensaje, hecho por Chris, tenía 9 motivos por los cuales Emma debería seguir luchando por su vida. Entre ellos el talento con el cual criaría a sus hijos y poder ayudar a otros a salir de la misma situación en la que ella se encontraba. Había también un ítem número 10, que tenía la siguiente pregunta: “¿Te casarías conmigo?”
Poder en dos
“Realmente creo que la lista de Chris me salvó”, afirma Emma. Después de aceptar el pedido, se entregó al apoyo de su novio para recuperarse. Ella sola no tenía fuerzas, pero sumando las fuerzas de los dos, el problema se resolvió.
“Él nunca se rindió, dijo que se quería casar conmigo incluso en mi peor momento. Y pensé: “Encontré a alguien aquí.”
La Biblia afirma que a partir del momento en el que una pareja se une en matrimonio, “no son ya más dos, sino una sola carne” (Mateo 19:6). Esta una sola carne debe permanecer unida y sacar fuerzas de esa unión para vencer cualquier obstáculo. Cuando está dividida, la pareja es débil. Juntos, sin embargo, el marido y la mujer son poderosos.
“Ustedes pueden estar pasando por momentos difíciles, pero si usted es fuerte y positiva, y elige mirar el lado bueno de todo y usa su fe para apoyarlo, estará haciéndose esencial en la vida de él, y él nunca se olvidará de eso. Y en los momentos difíciles la pareja inteligente se afirma aún más”, destaca Cristiane Cardoso, autora del libro “Matrimonio Blindado”
Ella señala que el hombre debe garantizarle seguridad a su esposa, mientras que la mujer debe siempre darle un nuevo impulso a su marido en la búsqueda de los objetivos de la pareja.
“La mujer fue creada llena de cualidades, y su papel en la vida de un hombre es extenso. No fue hecha del polvo de la tierra, sino de la parte más fuerte del cuerpo de Adán, el hueso. Fue tomada de la costilla para mostrar que debe caminar a su lado. Así como la costilla protege los órganos vitales, la mujer también tiene la capacidad de apoyar, comprender, admirar y estimular el crecimiento, así como otras cualidades”, explica Cristiane.
Emma afirma que no vencería el problema de salud sin Chris, y así debe ser en el matrimonio: unión para vencer el mal.
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