Él no solo dice la Verdad, él respira, vive, practica y la refleja como la única realidad que conoce…
“El testigo verdadero LIBRA a las almas; mas el engañoso hablará mentiras.” Proverbios 14:25
El testigo verdadero es el libró a su propia alma de la muerte eterna, arrepintiéndose de sus pecados, sepultando, a través del Bautismo en las Aguas, su pasado y buscando fervorosamente al Espíritu Santo. Sí, fue bautizado, y así se tornó un Testigo Verdadero con hechos, evidencias y carácter – la diferencia entre el antes y el después de conocer al Dios Vivo por intermedio del Bautismo con el Espíritu Santo.
Solo así nos tornamos un Testigo Verdadero de que el Señor Jesús resucitó y Vive en nosotros otra vez.
…pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. Hechos 1:8
No se olvide, testigo es aquel que vivió los hechos, que los presenció… Por eso, el Testigo Verdadero puede hablar con Autoridad, Coraje y Confianza, porque habla de aquello que vive, conoce, sabe, y no solo de aquello que oyó.
El Testigo Verdadero LIBRA a las almas, porque, además de evangelizar, está salvo y lleva (a la iglesia) a las almas para que se liberen del sufrimiento, del infierno en el que viven y de las mentiras que las han engañado y, consecuentemente, ¡¡¡les han generado dolor y aflicción!!!
Su Testimonio es Verdadero porque Conoció y Recibió El Mismo Espíritu de su Señor, que Es Verdad:
“Yo Soy el Camino, y la Verdad, y la Vida…” Juan 14:6
¿Usted ha sido el Testigo Verdadero?
Hay quien se contenta con tener testimonio de cura, prosperidad, realización sentimental, liberación de vicios… Pero aún no es El Testigo Verdadero que Libra a las Almas, porque aún no fue Bautizado con el Espíritu Santo.
Há quem se contente em ter testemunho de cura, prosperidade, realização sentimental, libertação de vícios… Mas, ainda não é A Testemunha Verdadeira que Livra Almas, porque não foi ainda Batizado com o Espírito Santo.
El Testimonio de Dios es Verdadero, y verdadero debe ser también el testimonio de Sus Hijos…