Usted se levanta todas las mañanas y sale a trabajar, va a luchar para llevar el sustento a su casa, se esfuerza, da lo mejor de sí para lograr ese objetivo, pero al final del día se da cuenta de que está peor que cuando arrancó.
Su negocio no crece, los clientes eligen a la competencia o simplemente dejaron de comprar lo que usted les ofrece. Ya probó haciendo publicidad, inventando promociones y hasta haciendo descuentos, pero parece que nada funciona.
Quizás usted trabaja en relación de dependencia, pero la situación es parecida. Sus ideas no prosperan, otros se llevan el crédito por su esfuerzo y hasta parece que no hay chances de ascender o, aunque sea, mejorar su nivel de ingresos.
Esa maldición que afecta su economía tiene que tener un punto final. Usted no puede aceptar que los días pasen y su situación empeore. Para que eso suceda, lo que necesita es acercarse a participar del Congreso para el Progreso, porque estaremos determinando el quiebre de esta maldición económica que traba sus caminos.
Lo esperamos este lunes a las 8, 10, 12, 16 y especialmente a las 20 h, para clamar y determinar que, de una vez por todas, la maldición económica sea quebrada. Este encuentro se realiza en Av. Corrientes 4070, Almagro.
El Congreso para el Progreso da resultado
Sandra: “Llegué al Congreso para el Progreso en la miseria. Mi marido no tenía empleo, yo trabajaba tres veces por semana pero eso no nos alcanzaba ni para comer, le pedía a mi mamá que alimente a mis hijos.
Empecé a usar la fe y hubo un cambio, mi esposo consiguió trabajo, hace poco lo ascendieron, mis hijos están trabajando donde quieren, toda la familia está progresando”.
Amelia: “Hace dos años y ocho meses que me encontraba desempleada. Toqué el Arca de la Alianza el lunes pasado y determiné que iba a conseguir empleo. Gracias a Dios, al día siguiente me llamaron y el miércoles comencé a trabajar, el Congreso para el Progreso funciona”.
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