Todo el mundo quiere una vida mejor, y darle lo mejor a su familia. Sin embargo, son pocos los que tienen la valentía para arriesgar o pensar en grande. Algunos consideran que sus sueños e ilusiones son inalcanzables. Una persona es exitosa cuando deja de verlos como sueños inalcanzables y empieza a verlos como metas que pueden ser alcanzadas. Quien tiene esta visión, lucha para que las cosas sean como ella quiere.
Muchos tienen miedo de dejar lo “seguro” porque les falta tener fe en sí mismo y en Dios. Recuerde que Él tiene un poder ilimitado, tenga la visión de la grandeza de Dios para ampliar su visión y avanzar económicamente.
Participe del Congreso para el Progreso este lunes a las 8, 10, 12, 16 y especialmente a las 20 h y prepárese para conquistar.
Resultados del Congreso para el Progreso
Fiorella, abogada: “Yo trabajaba para una empresa en la que no se me reconocía. A veces no tenía para pagar el colectivo ni las expensas. Cuando empecé a participar del Congreso para el Progreso empecé a creer en mí. Abrí mi estudio jurídico, compré el inmueble, conquisté un auto 0 km y un departamento en Palermo. Además, viajo a Europa todos los años”.
Héctor, emprendedor: “Yo vendía pan casero y café en una esquina, no tenía condiciones de pagar la luz. En el Congreso para el Progreso determiné que iba a ser bendecido. Yo tenía un juicio trabado desde el año 2011, al otro día me llama el abogado y me dice que había salido el juicio. Determiné que iba a ser de 3,8 millones y cobré eso. Compré mi casa, mi auto y tengo emprendimientos”.
Juan, emprendedor: “Yo era un empleado estatal, no tenía visión. Empecé a participar del Congreso para el Progreso y mi mente se abrió, empecé un microemprendimiento con un solo equipo y armé una empresa. Yo no tenía nada, hoy tengo mi casa de dos plantas, pileta, parque, un quincho de 90 m2. Dios hizo cosas grandes en mi vida”.
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