Tras la emergencia en Comodoro Rivadavia por el temporal que causó una catástrofe en la ciudad, 7600 personas fueron evacuadas, los caminos, rutas y puentes fueron destruidos por el paso de las impetuosas aguas que bajaban del cerro Chenque con lodo y piedras que arrastraban vehículos e invadían viviendas. Es que en 48 horas cayó la misma cantidad de precipitaciones que el promedio que se esperaba para cuatro años y colapsó la ciudad.
Todo se paralizó, se suspendieron las clases, se cortó el servicio de transportes, se cortó la luz y el agua y se evacuó a la población en centros asistenciales, escuelas, comedores, sociedades de fomento e iglesias. Luego de las lluvias, se evaluaron los daños y se calcula que hay unas 2000 viviendas que deberán ser reconstruidas junto a las rutas, puentes y escuelas dañadas por el paso impetuoso de las aguas y piedras.
Las imágenes de los medios de comunicación desde que comenzaron las lluvias mostraban ríos de lodo que circulaban por las calles destruyendo todo a su paso, arrastrando autos como si fuesen papeles. En esos instantes todo se perdió, todo menos la esperanza. La solidaridad de todos los argentinos comenzó a movilizarse, pero la ayuda que necesitan los habitantes de los barrios de Comodoro Rivadavia no solo debe ser ahora, sino durante un tiempo suficiente para que puedan recuperarse de los daños.
Solidaridad en acción
Apenas se tuvo conocimiento de este desastre, los voluntarios de la Universal montaron un operativo para recaudar alimentos no perecederos, agua mineral y ropa para los afectados por las inundaciones. Tan pronto como se pudo acceder a Comodoro Rivadavia, las donaciones partieron rumbo a los damnificados, por esa razón, el pasado 20 de abril la Organización T-Ayudo logró llegar hasta dos barrios que necesitaban asistencia: el barrio Moure y el barrio Máximo Abásolo. Allí entregaron 10 465 kilos de alimentos no perecederos y 19 750 prendas de ropa.
Los vecinos, que han regresado a sus hogares, han encontrado un panorama desolador, el barro cubrió las calles y el interior de las viviendas. Vecinos destacan que cuando el agua comenzó a subir, muchas personas aprovecharon la ocasión para delinquir mientras otras trataban de resguardarse junto a los más pequeños.
Desde que comenzaron las inundaciones la Municipalidad no tuvo forma de hacer frente a la magnitud del desastre y muchas personas no han recibido ayuda.
El drama al regresar a las casas
Algunos vecinos hablaron con los voluntarios y contaron un panorama de lo que fue el desastre, cómo están ahora y qué les pareció el gesto desinteresado de T-Ayudo:
Héctor Fabián, del barrio Moure: “Lamentablemente veo la situación que todos estamos pasando. Nosotros fuimos un barrio afectado y recién hoy estoy recibiendo ayuda a través de la ayuda que ustedes están aportando al barrio. He perdido todo lo que tenía en mi casa, mis vecinos también. Veo la solidaridad de ustedes que nos están dando una mano porque el día de hoy el municipio no nos trajo ni agua. Nadie se acercó para ver si necesitamos algo.
Es doloroso porque la situación sobrepasó a Comodoro Rivadavia. Me he cansado de sacar barro con palas, hemos pagado para sacar el barro que teníamos en la cuadra y todo lo que estaba destrozado. Durante el temporal no se acercó nadie, recién hoy por la mañana se acercó una asistente social. Han enviado ayuda y a nosotros no nos ha llegado nada, algunas empresas nos han dado agua y la Organización T-Ayudo nos acerca esta ayuda a cada familia”.
María: “Con este temporal perdí todo, salimos con mi esposo y mi hija como pudimos. Agarramos la documentación y algunas cosas y nos fuimos. El agua se llevó mi casa y todo lo que tenía adentro. Ahora estamos en el barrio Moure en la casa de una señora que no conocemos pero nos prestó una piecita y lo que necesitamos. Gracias por la ayuda que nos están dando”.
La Universal espera de brazos abiertos a todos los vecinos en Comodoro Rivadavia: Av. Rivadavia 951
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