Las personas llegan a hacer cosas terribles cuando son movidas por la envidia. Muchos subestiman el alcance de este mal, sin embargo, se han visto afectados por él y no se han dado cuenta de que han sido víctimas de este sentimiento maligno.
La Palabra de Dios dice:
“Cruel es la ira, e impetuoso el furor, mas ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia?” Proverbios 27:4
Aunque la envidia sea un poder destructivo, ningún mal puede derribar al que tiene la protección de Dios. La Biblia muestra eso claramente cuando los hermanos de José lo vendieron como esclavo, pero, a pesar de todo, el Altísimo lo salvó de las injusticias.
“Los patriarcas, movidos por envidia, vendieron a José para Egipto; pero Dios estaba con él, y le libró de todas sus tribulaciones, y le dio gracia y sabiduría delante de Faraón rey de Egipto, el cual lo puso por gobernador sobre Egipto y sobre toda su casa.” Hechos 7:9-10
¡Libérese de la envidia!
Si usted ha sido víctima de este mal y necesita la protección de Dios, participe este viernes, a las 8 h, 10 h, 12 h, 16 h o 20 h, del Santo Culto de Liberación y, por la fe, todos los espíritus malignos que lo han hecho sufrir se irán de su vida. ¡Haga la prueba!
En el Templo de la Fe, Av. Corrientes 4070, Almagro o en la Universal más cerca de su domicilio.
Si en su localidad rigen las medidas sanitarias que le impiden participar de las reuniones de manera presencial, usted podrá hacerlo de manera online, a las 20 h, a través de:
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