Una alianza es un compromiso de unión entre dos partes. Todos los días, las personas se alían entre sí en todo el mundo. Sin embargo, hay una clase de compromiso que es el más importante y que, lamentablemente, muchos han dejado de lado: la alianza con Dios.
De acuerdo con el obispo Edir Macedo, durante la segunda reunión de la Noche del Alma, realizada en el Templo de Salomón el miércoles 26 de enero, la alianza con Dios es un acto de obediencia a Su Palabra, y solo el que obedece Sus mandamientos puede alcanzar la Salvación.
«Dios hace y sigue haciendo una alianza con las personas, el que escucha Su voz, pasa a tener una alianza con Él, así como Abraham. Por otro lado, el que tiene una alianza con Dios, el que Lo obedece, garantiza la Salvación de su alma. En cambio, el que no Lo obedece no será salvo», comentó.
La alianza de Abraham con Dios
El obispo también destacó el pasaje bíblico del libro de Génesis, capítulo 17, versículos 22 y 23, que dice:
«Y acabó de hablar con él, y subió Dios de estar con Abraham. Entonces tomó Abraham a Ismael su hijo, y a todos los siervos nacidos en su casa, y a todos los comprados por su dinero, a todo varón entre los domésticos de la casa de Abraham, y circuncidó la carne del prepucio de ellos en aquel mismo día, como Dios le había dicho.»
«Aquí surgió la circuncisión de la carne, del prepucio del hombre. Esta circuncisión la leemos como Brit Milá, es decir, la palabra que Dios le dio a Abraham, que significa, en el antiguo hebreo, un corte, una circuncisión, una acción de parte del circuncidado hacia Dios. En otras palabras, él hizo una alianza con la Palabra, y solo el que tiene una alianza con Dios alcanza la gracia de la Vida Eterna», dijo.
Del Antiguo al Nuevo Testamento, la alianza de Dios con la humanidad
La explicación sobre la Palabra de Dios también se extendió al tiempo en el que el Señor Jesús estuvo en la tierra y fue crucificado para salvar a la humanidad.
«Dios hizo una nueva alianza con la humanidad a través de Su Hijo Jesús, el cual sacrificó Su cuerpo por nuestra alma y nuestro espíritu. Cuando se trata de la eternidad, no podemos ponernos en riesgo», destacó.
La Noche del Alma
Para saber más sobre este tema, participe de la «Noche del Alma», que se realizará el próximo miércoles, 2 de febrero, a las 8, 10, 12, 16 y 20 h. En el Templo de la Fe, y en todas las Universal del país.