Jorge vivió en la calle durante mucho tiempo y nunca pensó que podría convertirse en un empresario: “Un día iba al trabajo y al pasar por una plaza, veo a un grupo de gente que estaba ahí y me acerqué. Me quedé dos días y pasé a vivir con ellos, tomábamos, nos drogábamos, había perdido la noción del tiempo, no me bañaba, ni me cambiaba de ropa. Estuve durante 8 años viviendo en situación de calle. Para comer, revisaba los tachos de basura y pedía sobras en restaurantes. También pedía plata en las paradas de colectivo y en el tren, pero no era para comer, sino para mantener los vicios.
Tuve un accidente y se me formó un tumor cerebral. Estuve siete meses en coma, me operaron, me escapé del hospital y volví a la calle. Me enfermé de sarna, no podía caminar, dependía de los demás para que me trajeran comida.
Un día entré a un local sin saber que era una iglesia y empecé a escuchar que mi vida podía cambiar. Hice una prueba de fe en el Altar, y de a poco mi situación se transformó. Conseguí trabajo como ayudante de albañilería. Hoy soy empresario, tengo tres locales, un hotel, un garaje, cuatro autos, un PH y varios departamentos”.
Participe del Congreso para el Progreso a las 8, 10, 12, 16 y especialmente a las 20 h en Avenida Corrientes 4070, Almagro y en la Universal más cercana a su domicilio.
“Es el quinto lunes que participo en las reuniones del Congreso. Vine a luchar por mi hijo para que consiga otro trabajo y así pudiera salir adelante, ya que tenía una deuda. Lo llamaron, ya quedó efectivo en el trabajo y es por la tarde como él quería.”
“Participé del propósito como nunca y aun teniendo dificultades con mi esposo, me lancé. Gracias a Dios, tengo mi propia peluquería en un excelente local y cada mes nos va mejor, estamos prosperando.”
[related-content]