Para el celoso, cualquier situación es motivo de malentendidos y discusiones. Los celos son un sentimiento maligno que ha destruido a muchos matrimonios y, en los casos más graves, ha ocasionado tragedias.
Los celos indican que hay algo que no está bien espiritual, emocional y mentalmente en las personas que los padecen. Por eso, muchas que los sufren “sofocan” a su cónyuge con malas actitudes, reproches e incluso imaginan cosas que a veces no existen.
Estos sentimientos destructivos son el fruto de la inseguridad personal. Cuando uno de los dos es inestable, inseguro y tiene baja autoestima, piensa que su pareja encontrará a otra persona mejor que la reemplace. Por eso, a pesar de que el celoso es el que está dominado por esas emociones perjudiciales, es el cónyuge el que generalmente sufre las consecuencias.
Por lo tanto, la persona que desea ser feliz en el matrimonio y estar bien consigo misma, debe identificar sus inseguridades y reconocer primero su condición espiritual para que, de ese modo, pueda buscar el fortalecimiento. De lo contrario, su relación podrá terminar en cualquier momento.
Sane su interior
A través de las charlas de la Terapia del Amor, usted aprenderá a sanar su interior de los traumas del pasado y de los complejos que lo agobian. De esta manera, podrá disfrutar de una relación saludable.
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