Construir una carrera sólida demanda inversión, fuerza de voluntad y competencia. Ingredientes que, cuando son equilibrados, forman una base para el éxito profesional tanto de gestores y líderes, como de empleados. Sin embargo, algunos errores pueden interferir en la trayectoria y aún llevarlos rápidamente al fracaso.
El Máster en Coaching, Edmilson Chagas Pádua, explica que muchos profesionales terminan teniendo actitudes equivocadas en el trabajo pensando que están en ascenso. Sin embargo, no perciben que, en realidad, están presentando un comportamiento destructivo. “Muchos no tienen autoconocimiento y autocrítica de su perfil profesional. Entonces, en vez de caminar hacia el éxito, están declinando”, considera.
Eso ocurre porque, actualmente, muchas personas se esfuerzan, sin dudar, para entrar en el mercado de trabajo (en el caso de los empleados) o abrir su propio negocio (los empresarios), pero, con el tiempo, se acomodan. “Poner la carrera en piloto automático lo lleva a la derrota. Hay que esforzarse igual que al principio, porque en el mercado no hay espacio para los acomodados”, resalta.
Una de las actitudes que indican que el profesional está en la zona de confort es la procrastinación. El empleado que posterga solo sigue patrones y, por eso, termina siendo mal visto por los gestores. Pero, por otro lado, el que cuestiona e innova termina obteniendo siempre buenos resultados. “El que posterga atrasa la ejecución de las tareas y, por eso, está desmotivado, mientras que el esforzado siempre está disponible para las tareas”, compara Pádua.
Cuando se trata de gestores también hay rasgos de conducta que afectan negativamente a la carrera, como el exceso de seguridad en sí mismo y la imposición de su voluntad. “El mando y la vanidad hacen que no piensen en lo que es mejor para el negocio, sino para sí mismos. Esos van a fracasar. Ellos tienen que oír las opiniones del equipo para cambiar los pensamientos cuando sea necesario”, advierte el Máster en Coaching.
El especialista también destaca que los líderes no deben tener miedo de asumir responsabilidades. “Cuando algo no funciona, deben hacerse cargo de la situación, aunque tengan que asumir las consecuencias”, recomienda.
Use la fórmula correcta
En una reunión del Congreso para el Éxito en el Templo de Salomón, el obispo Edson Costa explicó que muchos líderes y empleados fracasan en la carrera porque no logran enfrentar las adversidades. “Usted ve el problema y viene el miedo. Entonces, se pone inquieto, ansioso, se desespera. Y cuando usted se desespera, habla tonterías.”
De esa forma, el método del fracaso consiste en ver el tamaño del problema, amedrentarse, hablar lo que no debe y, finalmente, ser derrotado. Pero, la llave para el éxito es otra. “La fórmula del éxito es imaginar su victoria. Y, una vez imaginando su victoria, el miedo ya no forma parte de su vida. Sin miedo no hay inquietud ni ansiedad y, sin ansiedad, usted no habla tonterías y, entonces, comienza a profetizar su futuro”, garantiza.
8 hábitos que perjudican su carrera
No compartir conocimiento
Los profesionales que no comparten lo que saben hacen que el conocimiento quede obsoleto. Al compartir con otras personas sus conocimientos, el trabajo de todo el equipo se engrandece.
Enfocarse solo en resultados personales
Enfocarse solo en el éxito propio perjudica todo el proceso y desestabiliza el grupo. Es necesario trabajar juntos en pro de un objetivo común.
No tener iniciativa
El profesional pasivo no tiene perspectiva y enfoque para alcanzar sus objetivos. Para tener éxito, es necesario no solo quedarse pensando en qué hacer, sino ser proactivo y actuar.
Tener miedo de arriesgar
Para mejorar en la carrera hay que correr riesgos y, para eso, hay que ser valiente. Entienda que arriesgarse no significa lanzarse en situaciones de incertidumbres, sino invertir en desafíos para obtener algo mayor.
Subestimar sus competencias
La persona que se subestima está siempre por debajo de sus capacidades. Es necesario aceptar sus limitaciones y ser humilde para adquirir las habilidades de otras personas.
Tener exceso de autoconfianza
El profesional que se sobrestima comete errores graves por creer que sabe más de lo que realmente sabe. Busque experimentar nuevas maneras de actuar para darse cuenta que los cambios pueden ser beneficiosos.
Insistir en el mismo rumbo
Las personas rígidas y que no están dispuestas a adaptarse a la realidad no llegan al resultado. Haga un planeamiento estratégico, con una visión a medio y largo plazo, para tener alternativas si un camino para la implantación de un proyecto no funciona.
Tercerizar la culpa
Transferir la autoría de las fallas a otras personas solo lo lleva a la ruina. Aunque los resultados no estén conforme a lo esperado, asuma la responsabilidad por sus actos.
¿Quiere aprender a enfrentar las dificultades del mercado de trabajo y convertirse en una persona vencedora? Entonces, no se pierda el Congreso para el Progreso, que se realiza los lunes a las 8, 10, 16 y 20h, en Av. Corrientes 4070 – Almagro o haga clic aquí y encuentre la Universal más cercana a su hogar.
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