Tras dos años de pausa, se realizó el Just Dance 2025, la competencia de baile que se desarrolló en todo el país durante marzo con el objetivo de promover la cultura y fortalecer los lazos familiares. Más de 10 mil personas, entre adolescentes y sus allegados, participaron con mucho entusiasmo de esta experiencia.
Los coordinadores del proyecto Cultura de la FTU (Fuerza Teen Universal) acompañaron a los adolescentes durante casi dos meses en su preparación. Durante ese tiempo, ensayaron y crearon coreografías de diversos estilos de baile, como folclore, pop y melódico. Cada presentación no solo fue una exhibición artística, sino también un medio para transmitir un mensaje de fe.
El evento contó con un jurado compuesto por profesores y profesionales de la danza, quienes definieron a los ganadores que recibieron premios como reconocimiento al esfuerzo, la dedicación y el talento.
Además, los chicos escucharon un mensaje basado en Génesis 2:7 que explica que Dios formó al hombre del barro y sopló en su nariz aliento de vida, y se convirtió en un alma viviente. Al respecto, reflexionaron sobre cómo muchos adolescentes sufren de depresión o tienen pensamientos negativos, debido a la falta del “Aliento de Vida” que es la presencia de Dios. Como consecuencia, se sienten vacíos y tristes, como un muñeco de barro sin alma. En cambio, con el ánimo que Dios ofrece, podemos superar cualquier adversidad y disfrutar de la vida, incluso cuando enfrentamos desafíos. Por eso, los que tienen ánimo… ¡lo celebran bailando!
Como en ediciones anteriores, los papás desempeñaron un papel fundamental en la organización del evento. Su apoyo y compromiso fueron clave. En un mundo donde cada vez más padres no pasan tiempo de calidad con sus hijos, esta propuesta buscó fortalecer esos vínculos familiares y fomentar una cultura de unión.