El pasado 7 de abril, el Obispo Macedo y el Pastor Tonny Asongkeng Cresant recibieron la condecoración de Embajador Humanitario Mundial, en la capital de Kinshasa, en la República Democrática del Congo. Fueron entregadas medallas y diplomas en homenaje al trabajo social realizado en el país que alcanza, principalmente, a la población más sufrida. En el año 2014, iglesias de varias denominaciones fueron perseguidas y algunas cerradas. Después de que las autoridades conocieron el trabajo social de la Universal, la Iglesia dejó de sufrir amenazas y fue homenajeada con la condecoración.
La ceremonia ocurrió en el Ministerio de Relaciones Exteriores del Congo y reunió a autoridades locales, entre ellas al ministro nacional de Economía, Modeste Bahati Lukwebo y al embajador de Canadá en Kinshasa, Nicolás Simard.
La condecoración fue entregada por la Organización Internacional de la Francophonie (FIFEF) al Pastor Tonny. El evento es realizado todos los años y les rinde homenaje a las instituciones o a los ciudadanos que son un ejemplo para la sociedad.
El trabajo de la Universal
En el año 2002, la Universal llegó a la República Democrática del Congo y, por medio del trabajo social realizado con la comunidad, los voluntarios distribuyen ropa y alimento en las calles, asisten a personas con enfermedades mentales y lepra, visitan asilos, cárceles, hospitales, y realizan donaciones de sangre.
“Muchas personas tenían prejuicios hacia la Universal, pero cuando vieron el trabajo serio que realizamos entendieron y comenzaron a apoyar”, explicó el Pastor Tonny.
Y completó: “Es maravilloso ver cómo Dios ha honrado al trabajo de la Universal, a pesar de todas las dificultades que encontramos aquí”.
La República Democrática del Congo
También conocida como Congo Kinshasa, tiene una población de 78.736.153 habitantes. El país es el tercero en extensión territorial del continente africano y sufre a causa de problemas sociales y guerras civiles. Según informaciones del Banco Mundial, la taza de pobreza es del 63,9%, y la expectativa de vida no supera los 59 años.
Datos divulgados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señalaron que 1,7 millones de personas del Congo Nishasa fueron forzadas a salir de sus casas durante el año 2017. En total, huyeron un total de 4,21 millones de personas. La crisis supera a los conflictos civiles en Irak, en Siria y en Yemen.