“Y respondió Moisés al pueblo: No temáis, porque Dios ha venido para poneros a prueba, y para que su temor permanezca en vosotros, y para que no pequéis.” Éxodo 20.20
Dios apareció para el pueblo en el Monte Sinaí, para que él viera su insignificancia ante el Poder, la Gloria y la Majestad del Altísimo. Para que, cuando él hablara, el pueblo lo temiera para no pecar, y así, obedecer todas sus Leyes y mandamientos.