“Y dijo: Si escuchas atentamente la voz del Señor tu Dios, y haces lo que es recto ante sus ojos, y escuchas sus mandamientos, y guardas todos sus estatutos, no te enviaré ninguna de las enfermedades que envié sobre los egipcios; porque yo, el Señor, soy tu sanador.” Exodo 15.26
Moisés alertó al pueblo de Israel para que obedeciera la voz de Dios para que escogiera hacer el bien y así fuese una nación bendecida y libre de las enfermedades que avasallan a los que se alejan de su presencia.