“Al contrario, vivo con mucha disciplina y trato de dominarme a mí mismo. Pues si anuncio a otros la buena noticia, no quiero que al final Dios me descalifique a mí.” 1 Corintios 9:27
Para Dios lo importante es lo que somos, y no lo que hacemos, incluso como sus mensajeros. Dios es el Gran “YO SOY” y quiere que sus hijos sean como Él es, justos y verdaderos.