Claudia sufrió mucho durante la infancia. Su mamá se fue de la casa cuando ella aún era una niña. Este hecho la hacía sentir sola y decepcionada. A partir de allí, su comportamiento comenzó a cambiar y entró a un estado depresivo que aumentaba con el paso del tiempo.
Tenía la convicción de que la vida era solo sufrimiento. Ya nada le interesaba y desde muy joven comenzó a consumir marihuana y pastillas.
Incluso, después de casada, vivía descontroladamente. Todo lo que ganaba lo gastaba en los vicios y en las salidas. Muchas veces intentó suicidarse. En una de ellas, mientras se dirigía a las vías del tren, una persona le entregó el diario de la Universal y decidió acercarse.
Claudia vio muchos cambios en su vida cuando comenzó a usar la fe, pero su interior cambió cuando participó del Ayuno de Daniel. Cuando recibió el Espíritu Santo su vida se transformó.
Usted también puede acercarse al Templo de la Fe, ubicado en Avenida Corrientes 4070, Almagro, o a la Universal más cercana a su domicilio, y enterarse cómo participar del Ayuno de Daniel, para recibir la felicidad más grande a través del Espíritu Santo.
