Ganó un juicio que estaba trabado
“Hacía más de cinco años que tenía un juicio trabado. Se complicó y parecía que cada vez había menos para cobrar. Pero participé del Ayuno Colectivo, me levantaba de madrugada. Luché durante un tiempo. Finalmente, Gracias a Dios, lo pude ganar el mes pasado y voy a cobrar bastante dinero”.
Pidió por su hijo y fue bendecido
María Rosa llegó al Ayuno Colectivo para pedir por su hijo, él se había recibido de cocinero y no conseguía trabajo: “Le ofrecí un microemprendimiento y al principio no aceptó. Pero hice los Ayunos y perseveré por él. Hasta que me hizo caso y empezó. El mayor milagro es que mi hijo esté en la fe”.
“No necesito el bastón, estoy feliz”
Amanda se acercó por su problema de movilidad: “Hacía dos años que no podía limpiar, planchar, ni lavar; todo lo tenían que hacer mi marido y mi hijo. Pero, al participar del Ayuno Colectivo, pude dejar el bastón. Gracias a Dios, es el primer día que vengo sin usarlo. Ahora puedo ordenar mi casa, estoy feliz”.
“Querían echarnos del departamento”
Graciela: “Tuvimos problemas con cheques, nos estafaron. Querían echarnos del departamento e iban a embargar a mi esposo. Yo no lo aceptaba y busqué la ayuda de Dios. Hasta que nos dijeron ‘levantamos el cheque y no le voy a embargar nada’. Además, a mi marido lo llamaron clientes y pude pagar las deudas”.
Participe del Ayuno Colectivo todos los sábados a las 7, 9, 15 y 20 h en Av. Corrientes 4070, Almagro.
Si usted quiere comunicarse con nosotros, puede hacerlo llamando al (011) 5252-4070.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en este periódico,como en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben ser interpretados en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.