Para Mónica la muerte de su padre marcó el comienzo de sus problemas. Desde los 12 años tuvo que salir a trabajar para ayudar a su familia, después cuando cumplió 18 años se convirtió en madre soltera y más tarde descubrió que estaba infectada por el virus del HIV. Sin embargo ella sacrificó en la Campaña de Israel y vio los resultados en su vida.