Grupos ecologistas afirman que la necesidad de proteger la naturaleza y con ello la vida en nuestro planeta
Este domingo 22 de abril se celebra en todo el mundo el Día Internacional de la Tierra, que tuvo sus comienzos, allá por la década del 70. Se calcula que más de 500 millones de personas en 85 países de todo el mundo las que celebren el Día de la Tierra.
En los últimos 40 años se ha perdido cerca del 30 por ciento de la biodiversidad del planeta como consecuencia del cambio climático, en el mismo sentido se ha duplicado la demanda de recursos naturales. Contaminación de los mares y ríos, la desertificación, el uso de sustancias tóxicas, guerras que provocan el desplazamiento de millones de personas cada año, son parte de un caos que parece no tener fin.
El nivel de consumo de las naciones industrializadas está por encima de las posibilidades reales del planeta. Los ambientalistas destacan que de continuar con el modelo de desarrollo actual se necesitarían varios planetas para poder satisfacer las demandas de la sociedad moderna. Unido a esto, aumenta la brecha entre los países ricos y pobres, estos últimos víctimas de los constantes saqueos que hacen de sus recursos naturales.
A pesar de las constantes demandas y el debate en torno al futuro de la supervivencia del planeta, no existe un comprometimiento real, ni la voluntad política de países como los Estados Unidos, principal emisor de gases contaminantes a la atmósfera, para buscar una solución definitiva que satisfaga las exigencias de un planeta enfermo por el afán desmedido de un puñado de naciones que se hacen de oídos sordos ante el reclamo mundial.
Esta fecha fue adoptada para hacer un llamado de alerta a los Estados e instituciones gubernamentales sobre la necesidad de cambiar el modelo de desarrollo actual.