Pero no basta apenas desear que suceda un cambio, lo fundamental realmente es establecer de qué forma eso se hará
El día estaba naciendo nublado. Aquella muchacha, que tenía programado encontrarse con las amigas y hacer aquel fin de semana inolvidable, se rindió a la tristeza temprano, pues, en sus planes había sol, las horas serían más calurosas y con viento suave, lo que la motivaría volver a casa, recién al final de la tarde para, entonces si, descansar para el otro día.
Al ver el cielo grisáceo, no pestañeó, volvió a la cama un tanto desanimada y les mandó un mensaje por celular, sin muchas explicaciones, a sus compañeras de paseo; avisando que tendría que cancelar su presencia.
Su madre no podía creer en esa actitud y dijo: “La vida está hecha de decisiones y necesita de, al menos, pequeñas innovaciones para que valga realmente la pena. Tu puedes transformar tu día, en lugar de esperar que pase desapercibido. Lluvia, viento, el sonido de los pajaritos, todo eso es existencia.” Y sin esperar que ella respondiese, salió del cuarto de la muchacha.
La lluvia comenzó a caer, y al escuchar ese sonido encantador, ella se levantó rápidamente, tomó una toalla, la dejó en una silla, en la parte cubierta del balcón y fue en dirección a las gotas que caían. Aquel baño fue renovador y, a partir de allí, la gota comenzó a repensar en cuan simple es la vida, basta querer ser feliz.
¿Qué es lo que usted quiere?
La Biblia dice:
“La mano negligente empobrece, pero la mano de los diligentes enriquece. El que recoge en verano es hombre sensato, pero el que duerme en tiempo de siega, avergüenza.” Proverbios 10:4-5
Relación con el compañero, familia, empleo. ¿Quién no quiere cambiar algo en la vida para mejor? Para eso, no basta apenas desear que suceda un cambio, lo realmente fundamental es establecer de qué forma eso se hará. Después de todo, es fácil caer en la trampa de estipular metas de cambios que parecen no llegar nunca.
“Los principales villanos son los pensamientos negativos, ellos solo apartan lo que puede suceder de bueno. Esas fuerzas internas son más difíciles de eliminar, necesita perseverancia para vencerlas”, comenta la psicóloga Michele Medeiros Crespo. Según la especialista, otro enemigo común es la pereza, además de la tendencia de culpar al otro, o a las circunstancias por la dificultad de cambiar.
Puede haber mil problemas y el doble para hacer que usted desista, pero, con persistencia es posible cambiar, con actitudes que no necesitan de tantos esfuerzos, lo importante es no permitirse parar el tiempo y volverse rehén del pasado. “Sonría siempre. Imagine que usted tiene una reunión que causará tensión. Hay dos alternativas: empeorar el día o entrar en la sala sonriendo y hablar con todos de manera amigable. De esta manera, la mitad de la tensión será aliviada allí”, sugiere la psicóloga. Otro ejercicio para proporcionar un aumento en su felicidad es mantener una sonrisa por 20 segundos.
No quiera solo comprar bienes materiales, creyendo que éstos pueden hacerlo más feliz, eso es pasajero. Preocúpese principalmente en adquirir experiencia. Vea a un filme, vaya a lugares diferentes, incluso a aquellos que le parecen muy extraños. “Cualquier situación que favorezca la oportunidad de entrar en contacto con otras personas es valiosa, siempre tienen mucho para ofrecer, sea con una situación a seguir o no. Siempre habrá alguien que pueda darle una palabra sabia”, comenta Michele.
La vida está hecha con fe, y de los momentos en que usted toma el teléfono para hacer una llamada inesperada a alguien que pueda, en aquel momento, necesitar realmente una palabra amiga y una mano extendida, de una expresión de agradecimiento, de servir al prójimo, ser cariñoso y actuar más con la razón que con la emoción.