Todas las semanas el Arca Universal va a hablar de un tema específico relacionado al comportamiento, sobre cómo podemos mejorar nuestras virtudes. El tema de esta semana es el amor. ¿Cómo usted ha actuado con las personas? ¿Y con su familia y amigos? Observe los consejos para mejorar esta virtud en su vida.
1. Ámese: cuide su apariencia física y vaya al médico con regularidad. Preste atención a usted mismo, sin exageraciones, para que eso no se transforme en egoísmo y así se autodestruya. Usted debe amarse, pero, sobre todo, debe prestarle atención a su vida espiritual. Amarse a sí mismo va mucho más allá de los aspectos físicos – tienen que ver con el cuidado del alma también.
2. Perdónese: ¿Usted ya sufrió con ese terrible sentimiento de culpa? ¿Algo que usted hizo o dejó de hacer, que dijo o dejó de decir? Es una sensación que nos corroe y nos hace detenernos en el tiempo. Deje ir eso. Olvídese de sus errores, a fin de cuentas, ¿quién nunca los cometió? Abandone el pasado y largue en el olvido todo el peso que lo sobrecarga. Usted no necesita cargar eso para ser feliz.
3. Mire más allá de usted: Se acuerda de lo que el Señor Jesús habló, cuando dijo que debemos amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos? Practique ese mandamiento. Hable con ese compañero de trabajo con quién nunca habló, ofrézcale ayuda a una persona que lo necesite, oiga a quien necesita desahogarse. Los gestos simples pueden mostrar que somos personas que miran más allá de su propio ombligo y que estamos aptos para ser solidarios.
4. Dedíquese a su prójimo: Vea cómo está de tiempo. Disponga un poco de él para el otro. Si fuere necesario, haga un sacrificio por él. A veces, las personas no necesitan mucho para sentirse amparadas.
5. Ame a Dios: Es muy fácil abrir la boca y decir que amamos a Dios. Si usted Lo ama de verdad, entonces debe probar que ese amor es real, colocándolo en primer lugar en su lista de prioridades. Cuando despierte, lea la Biblia y medite en los versículos. Antes, no obstante, pida le dirección del Espíritu Santo para que comprenda el mensaje. Inmediatamente practique lo que aprendió. Pruébese a usted mismo y a Dios que usted realmente Lo ama y está dispuesto a llevar una vida de acuerdo con Su voluntad. ¿Quién dijo que amar es fácil?
6. Oiga a quien le ama: No siempre es fácil oír un no cuando queríamos oír un sí, ¿no es verdad? Eso sucede con nuestros padres, cónyuges y amigos verdaderos. Sin embargo, oír a quien nos ama nos ayuda a evitar posibles trastornos. Así también es con Dios. No se olvide de que Él le ama de hecho y ya probó ese amor cuando Se entregó por entero a usted. Por lo tanto, oiga Su dulce voz. Mantenga su espíritu siempre en oración, para que perciba lo que Él tiene para decirle o mostrarle.
7. Ore siempre: Es muy bueno estar siempre cerca de quien amamos, ¿no es verdad? La sensación que tenemos es que estamos constantemente amparados. ¿A quién no le gusta amar y ser amado? En relación a Dios es lo mismo. Si usted Lo ama, entonces por qué hablar con Él solo una vez a la semana o sino estar sin hablarle? Dios le ama, y mucho, por eso, hable con Él a cada instante. Siempre que quisiere o necesitare, doble sus rodillas, o de pie, sentado o trabajando, hable de sus aflicciones o simplemente agradézcale por Su infinita misericordia en su vida.
¿Usted ha actuado con amor en su vida? Cuente los resultados de sus actitudes.