El intento de los Gobiernos nacionales para establecer una política mundial para la vigilancia de internet se desplomó el jueves pasado, después de que muchos países occidentales dijeron que un plan de compromiso da demasiado poder a las Naciones Unidas y a otros funcionarios.
Los delegados de los Estados Unidos, Reino Unido, Australia y otros países tomaron la palabra en el penúltimo día de una conferencia de la ONU en Dubai para rechazar las revisiones a un tratado que rige las llamadas telefónicas internacionales y el tráfico de datos.
“Es con gran tristeza y una sensación de pérdida de oportunidades que EEUU debe comunicar que no es capaz de firmar el acuerdo en su forma actual”, dijo el embajador de EEUU, Terry Kramer, en la reunión de la Unión Internacional de Telecomunicaciones de la ONU.
Aunque otros países firmen el tratado este viernes, la ausencia de muchas de las principales economías del mundo significa que el documento, ya diluido para satisfacer gran parte de Occidente, tendrá poca fuerza práctica. “Va a traer algunos problemas legales entre los países que han firmado y los que no”, dijo un delegado sudamericano que no quiso ser identificado.
Aunque los técnicos que habían levantado alarmas sobre un procedimiento que hubiera legitimado más la censura y la vigilancia de los gobiernos, la imposibilidad de alcanzar un acuerdo podría aumentar la posibilidad de que internet funcione de manera muy diferente en las distintas regiones.
“Tal vez en el futuro podríamos llegar a un internet fragmentado“, dijo el delegado Andrey Mukhanov, un alto funcionario internacional en el Ministerio ruso de telecomunicaciones y comunicación de masas, a Reuters. “Eso sería negativo para todos, y espero que nuestros colegas americanos y europeos lleguen a una posición constructiva”.
Los delegados de Estados Unidos y otros países dijeron que continuarían presionando en otras reuniones internacionales en apoyo de lo que llaman un “modelo multilateral” para establecer estándares.
Las dictaduras, quejosas
Los países que habían estado buscando una ampliación de la función de la UIT reaccionaron con cierta amargura ante la imposibilidad de llegar a un consenso.
El jefe de la delegación de los Estados árabes, Tariq al-Awadhi, dijo que su grupo había sido “traicionado” por el bloque de EEUU después de haber llegado a un acuerdo de compromiso que trasladó temas de internet del tratado principal a una resolución no vinculante. Además dijo que la UIT debería ser parte del modelo de múltiples partes interesadas.
“Desafortunadamente, estos países han roto el paquete de compromiso y lo han destruido totalmente”, dijo Awadhi. “Hemos dado todo y no hemos recibido nada”.
Awadhi dijo que el tratado debería haber cubierto todas las formas de telecomunicaciones, incluyendo voz sobre internet (VoIP) y servicios como la mensajería instantánea. “Están utilizando la red de telecomunicaciones y el uso de servicios de telecomunicaciones”, dijo.
Kramer dijo a la prensa que los Estados Unidos habían negociado de buena fe, pero que había varias cuestiones que hacen imposible un acuerdo, incluido el reconocimiento de la resolución de una función de la UIT. Dijo que una sección que buscaba la reducción de correos electrónicos no deseados conocidos como spam, por ejemplo, abría la puerta a la supervisión del Gobierno y al bloqueo de los mensajes políticos o religiosos.
Una de las causas principales de oposición de EEUU, una cláusula que podría haber dado a los países el derecho de administrar las direcciones de internet, fue eliminada del tratado durante los intentos de salvar el acuerdo.
El giro fue una derrota para la UIT y para el Secretario General Hamadoun Touré, que había pronosticado anteriormente que la conferencia alcanzaría un acuerdo para una suave regulación de internet. Pero añadió que la reunión de 12 días “ha logrado atraer la atención pública sin precedentes ante las perspectivas diferentes e importantes que rigen las comunicaciones globales”.
Entre los países que dijeron que no podía firmar, al menos sin consultar los representantes con sus Gobiernos, se encontraban la mayoría de las naciones de Europa occidental junto con Canadá, Filipinas, Polonia, Egipto, Kenya y la República Checa.
El bloque de EEUU aprobó la propuesta del Grupo Africano de añadir una frase en un tratado relativo a los derechos humanos.
Los delegados occidentales dijeron que efectivamente se ha reintroducido una propuesta polémica que afirma que ningún país puede permitir que otro le niegue el acceso a las redes de comunicación, que según ellos se extendía demasiado en el ámbito político.
“Preferimos que no haya resolución en internet en absoluto, y estoy sumamente preocupado porque el lenguaje que acaba de aprobarse abre esa posibilidad a internet y a su contenido”, dijo el jefe de la delegación del Reino Unido, Simon Towler, después de que la propuesta africana fue aprobada.