Relacionarse con alguien no es tarea sencilla. No siempre se encuentra a una persona con los mismos objetivos y parámetros de vida. Por lo tanto, hay que tener mucha cautela y respeto al iniciar o mantener una relación donde el foco de cada uno es diferente.
Para la psicóloga Regiane Machado, los objetivos de la vida del otro deben considerarse desde el principio para evitar futuros conflictos y discusiones. “Además es saludable, incluso para la relación, continuar valorando la individualidad. Sueños y objetivos deben ser respetados. Conversar con el otro sobre sus sueños individuales es importante porque el otro pasa a conocer y, puede incluso ayudar y motivar la relación.”
Sin embargo, el problema puede comenzar después de que la relación ya esté establecida, cuando los deseos entran en conflicto. “Si nunca conversaron sobre el tema, es bueno comenzar a hacerlo, porque en algunos casos, pueden quedar molestos, inseguros, con baja autoestima por no colocar sus sueños en práctica, y muchas veces nunca hablaron y no saben si realmente sería posible o no.
Los objetivos individuales necesitan ser alineados y acordados entre ambos. Eso facilitará y armonizará la convivencia”, enfatiza Regiane.
Para amenizar las diferencias en los objetivos y no transformarlos en motivo de una separación conyugal es necesario mucho diálogo. “Lo ideal es que los focos individuales y de la pareja sean hablados, respetados y acordados. Además, ambos deben saber que hay momentos en que es importante reflexionar en cuanto a las elecciones y prioridades”.
Evitando frustración en la relación
La frustración puede ser el primer sentimiento después de saber que los objetivos de la persona que se ama son diferentes. Para evitar esta decepción, el diálogo para habituarse al otro es el mejor camino. “Una de las mejores resoluciones es que ambos dejen en claro sus focos de forma sincera y busquen llegar a un denominador común que los satisfaga individualmente y como pareja. Eso no quiere decir que debe desligarse de sus propios objetivos, pero sí quizás adaptarlos”, enseña la psicóloga.
Es para evitar discusiones, desacuerdos o hasta el rompimiento debido a los objetivos diferentes, que el diálogo siga siendo el principal aliado en una relación. “Además, claro, de respeto, compañerismo y complicidad. Planeen cuándo y cómo pondrán en práctica los sueños de los dos”, finaliza Regiane.
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