En Éxodo 30:11-16, Dios habló con Moisés y estableció que se cobre medio siclo a cada hijo de Israel en el censo anual, para la expiación personal y el mantenimiento del Tabernáculo. El siclo, o shekel, era una medida de peso cuyo nombre sirvió para la moneda de los judíos, como lo es actualmente. No importaba la condición social del israelita: cada uno pagaba medio siclo, demostrando que todos los hijos de Dios eran igual de importantes para Él y eran igualmente responsables para obedecerlo.
El medio siclo sirvió no solo para la construcción del Tabernáculo y su mantenimiento, sino también, con el mismo fin, para el Templo de Salomón y el Segundo Templo – el libro 2 Crónicas 24:4-16 muestra una de las recaudaciones del tributo para la restauración que dio origen al Segundo Templo.
La costumbre del medio siclo continuó, con algunas interrupciones (debido a las diferentes invasiones que dominaron a Israel), por 1.424 años hasta que fue prohibida por el emperador romano Adriano en el año 135 d. C. mucho después de la destrucción del Segundo Templo por Roma. Para el emperador la recaudación del medio siclo, incluso durante la diáspora, daba la idea de que el pueblo seguía pagando el tributo para mantener su soberanía, al menos de manera simbólica – de allí la prohibición.
Hoy, el medio siclo todavía es usado simbólicamente por algunas comunidades judías, que acuñan medallas especiales con esa intención – sin la antigua conexión con el censo. Otra simbología actual es una donación hecha en la fiesta de Purim, destinada a la caridad.
En excavaciones conducidas por la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA) y por la Universidad de Haifa, una antigua moneda de plata fue encontrada en un canal de desagüe de la Ciudad de David.
Después de investigaciones, los arqueólogos descubrieron que aquel modelo de moneda era habitualmente usado para pagar la tasa de medio siclo en la época del Segundo Templo. El dinero usado era acuñado en Tiro, con gran presencia en Jerusalén.
La moneda de 13 gramos tiene en un lado la efigie de Melcarte, dios pagano del reino de Tiro (equivalente al canaanita Baal) y del otro la figura de un águila posada en la proa de un barco (Tiro era famoso por sus excelentes barcos y por la ciencia de navegación). Según los especialistas, fue acuñada en el año 22 d. C. y es de una clase rara- solamente siete ejemplares de siclo tirio se encontraron en excavaciones en Jerusalén hasta el final de la década pasada, según la IAA.