Uno de los problemas de la vida moderna es el estrés. Si hasta hace poco tiempo no se trataba de algo que afectaba la vida de las personas, ahora parece haberse vuelto algo muy serio. En Argentina, la desaceleración de la actividad económica afectó la salud de los trabajadores.
Un sondeo realizado por la consultora Regus mostró que ocho de cada diez encuestados notaron enfermedades vinculadas con el estrés a partir del empeoramiento de la economía.
La encuesta también detectó que el estrés está causando un “preocupante aumento en el ausentismo”, cosa que daña la productividad empresarial y el bienestar del trabajador.
La medición realizada por la consultora tomó en cuenta la opinión de más de 400 trabajadores, ejecutivos y dueños de empresas, y observó que las enfermedades relacionadas con el estrés pueden empeorar o causar un conjunto de problemas de salud que van desde la obesidad hasta los problemas cardíacos, la enfermedad de Alzheimer, la diabetes, la depresión, molestias gastrointestinales y asma.
Cada vez más jóvenes
Otra investigación, realizada por D’Alessio IROL en 500 personas, reveló que el 80% de los trabajadores dice padecer de estrés laboral, mientras que la mitad ha afirmado padecer estrés frecuente, diario o semanal y se ha adelantado a 25 años la edad en la que se dispara la patología.
Según el sondeo, un 41% de los consultados está preocupado por perder su trabajo; otro 58% dijo que sus familiares y amigos han notado que están estresados en el trabajo y otro 64% afirmó que el estrés está dañando las relaciones personales con sus colegas.
¿Cómo lidiar con el estrés?
1. Reconozca la situación.
Definir si usted tiene o no control sobre una situación que le causa irritabilidad es el primer paso. No es posible tener control sobre el comportamiento del otro. A partir de ahí, el profesional debe decidir si va a convivir con la situación o huir de ella. Si hay mucho descontento, la alternativa puede ser cambiar de área o buscar una nueva oportunidad laboral en otra empresa. Si sus valores y sueños no coinciden con los de su empleador, lo mejor es buscar un nuevo empleo.
2. No sea impulsivo ni esté a la defensiva.
El profesional necesita identificar los síntomas del estrés. Cuando aparezcan, hay que adoptar un comportamiento racional. En muchos casos, el profesional incorpora una conducta defensiva por sus dificultades en manejar el estrés, pero, a veces una charla con el jefe puede ser suficiente para solucionar el problema.
3. Controle el tiempo.
Es necesario hacer una pausa durante la jornada. Cada 2 horas tómese un recreo de 5 minutos. Hágase un café, hable de sus actividades del fin de semana. El profesional también debe planificar su día de trabajo y considerar imprevistos. Si surgen, reorganice sus tareas.
4. Cuídese.
Los profesionales que adoptan un estilo de vida saludable se recomponen de situaciones estresantes más rápidamente. Duerma bien, aliméntese saludablemente y haga actividades físicas.
5. Trabaje por estímulo.
Aunque su actividad profesional no provoque el placer anhelado, comprenda que, a veces, es necesario pasar por etapas indeseadas para alcanzar metas y objetivos.
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