El colesterol es un lípido, una sustancia grasa, indispensable para el correcto funcionamiento del organismo, ya que compone las membranas que envuelven las células y es la base para la producción de los ácidos biliares y las hormonas. Es incorporado al cuerpo mediante la ingesta de algunos alimentos y también sintetizado por el organismo para posteriormente ser llevado a través de la sangre hasta los diferentes órganos. Pero cuando los niveles de colesterol se elevan, (hipercolesterolemia) los depósitos grasos se acumulan en las paredes de las arterias, haciendo que éstas se estrechen, endurezcan y pierdan su elasticidad dificultando así el normal fluido de la sangre produciendo enfermedades vasculares, entre ellas, la arterosclerosis.
Causas de colesterol alto
– Factores genéticos
– Ciertas enfermedades como por ejemplo las hepáticas, renales u hormonales
– Consumo de algunos fármacos
– Mala alimentación y sobrepeso
– En las mujeres la llegada de la menopausia
– Los niveles de colesterol se elevan con la edad
– Un factor indirecto que se relaciona con el aumento de colesterol es el estrés psicológico
– El tabaquismo incrementa el perjuicio sobre las arterias que provoca el colesterol, ya que el tabaco contiene sustancias oxidantes
Síntomas de colesterol alto
El colesterol alto no produce síntomas específicos, claros, sino que todos ellos están muy relacionados con los producidos por las afecciones vasculares, las cuales tienen como causa principal la elevada concentración de colesterol en sangre. Concentraciones por arriba de los 200 miligramos, pueden provocar isquemias cardíacas, infarto del miocardio, arterosclerosis y ataques cerebrales.
Entre los síntomas de enfermedad vascular asociados al colesterol alto están:
– Pérdida del equilibrio y mareos
– Agitación al moverse
– Hinchazón o entumecimiento de las extremidades
– Dolores de cabeza
– Dolor en el pecho
– Visión difusa
– Ataque cardíaco a causa la constricción de las arterias
– Accidente cerebrovascular a causa de un coágulo sanguíneo
– Xantomas (pequeños bultos amarillos) alrededor de los ojos
Dado que la sintomatología de colesterol elevado no es concreta, muchas veces cuando la persona consulta, sus niveles de colesterol ya están en estadios muy avanzados y han provocado daños (obstrucción severa de las arterias por acumulación de grasa) que para revertirse (destapar las arterias) requieren de una cirugía o un cateterismo. Pero esto podría evitarse si se controlaran los niveles de colesterol con regularidad a través de un análisis de sangre y se tomaran las medidas de prevención necesarias, entre ellas, modificar los hábitos alimenticios para bajar los niveles.
Modificaciones en los hábitos alimenticios para bajar y controlar los niveles de colesterol:
– Privilegiar la ingesta de frutas frescas y secas, verduras, legumbres, cereales, lácteos descremados o semidescremados, aceites vegetales con alto contenido en grasas no saturadas (girasol, oliva y maíz), pan francés o integral y galletas de bajo contenido graso
– Evitar el consumo de embutidos, chacinados, fiambres, snacks, comida chatarra, productos de confitería, alimentos industrializados, crema de leche, mayonesa, manteca, grasas de origen animal, yema de huevo
– Limitar el consumo de carne roja y de aves (preferentemente sin piel) a un máximo de 3 veces a la semana y optar por las carnes más magras
– Consumir pescado al menos 3 veces a la semana
– Al cocinar deben privilegiarse los siguientes métodos de cocción: Hornear sin aceite, hervir, cocinar al vapor, a la parrilla