Martina Elizondo enfrentaba una situación muy delicada como mamá, su hija se encontraba con problemas de salud y los médicos le habían dado un pronóstico aterrador. “A los 20 años su hija va a quedar ciega completamente”, esas palabras daban vueltas en su cabeza y alteraban sus nervios porque sabía que su hija cada vez estaba peor.
Este problema no solo terminó afectando su salud con diversos dolores y episodios de mucho nerviosismo, también afectó la relación con su esposo. “Recuerdo que tenía dolor de estómago, dolor de espalda, también en la nuca y en los huesos. Incluso, por estar tan nerviosa discutía con mi esposo, me enojaba y me desquitaba con los chicos”.
No estaban pasando por un buen momento económico, Martina y su familia vivían en una casilla que se llovía y en la que entraba mucho frío. Ante los ojos humanos era prácticamente imposible revertir la situación, sin embargo, cuando ella invocó el poder del Dios de lo Imposible, su situación cambió.
“Mi hija fue sanada. No sucedió lo que los médicos habían pronosticado, fue un milagro. Yo fui libre del nerviosismo y de los dolores y mi familia fue transformada completamente. Nuestra situación cambió, por mi fe logré las respuestas que necesitaba para tener una vida diferente”, concluye sonriendo.
Todos los sábados a las 8, 10, 15 y 19 hs. en Av. Corrientes 4070 – Almagro.
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