Hola Renato,
Descubrí que mi prometido sale con travestis, prostitutas… ¿Qué hago? Estoy perdida, solo lloro, quiero salir corriendo, huir pero no sé hacia dónde… Mi primer pensamiento fue abandonarlo, pero acabamos de unirnos, de irnos a vivir juntos. Tengo un hijo de 11 años, esta es mi principal preocupación pues cambiamos toda la rutina… Y ahora qué hago, por el amor de Dios, ¡ayúdeme! – M.
Hay tantas cosas equivocadas en usted, amiga, que su menor problema, en realidad, es su prometido. Solucionar el caso de él es simple: termine el compromiso, vuelva a su casa (o échelo a él), cambie su número de teléfono, y nunca más contacte al sinvergüenza. Esto probablemente le llevará un día o dos para hacerlo.
Sin embargo, su mayor problema está dentro suyo, y este llevará más tiempo resolverlo. Vamos a ver solo algunas caras de este problema, que pude detectar en sus pocas líneas anteriores:
*Usted se comprometió con alguien que no conocía totalmente. Todo bien, él puede haber sido un excelente actor, puede haber fingido y escondido muy bien su otro lado. Sin embargo, mi sospecha es que su carencia y sus sentimientos por él la cegaron al punto de que usted no vea lo obvio – o fingía que no lo veía.
*Usted me escribió para preguntar qué hacer. Una mujer fuerte mental y emocionalmente sabría qué hacer en su situación sin necesidad de preguntar la opinión de nadie.
*Usted está perdida y llorando por un sinvergüenza. A pesar de ser madre de un niño de 11 años, que la necesita más que todo en este momento, usted se está olvidando de él y de sí misma solo para recordar y llorar por quien no la merece.
*Usted está en duda si debe abandonar a su prometido o no. A pesar de que su primer pensamiento haya sido abandonarlo, ahora está en duda porque se pone a pensar en el cambio de rutina para usted y para su hijo.
*Usted se fue a vivir antes de casarse. Independientemente de lo que la motivó a eso – convivencia, compartir los gastos, sexo o cualquier otra razón – usted se desvalorizó, se menospreció delante de un hombre (sinvergüenza) que no necesitó hacer nada más allá que decirle algunas palabras románticas para llevarla a la cama.
*Usted está causando indecibles traumas emocionales a su hijo con ese estilo de vida. Me imagino en el lugar de su hijo, a los 11 años, ya habiendo perdido a su padre, ahora sufriendo de nuevo y teniendo que ver a su madre sufrir por tomar decisiones tan mal pensadas.
Quizás usted piense que yo estoy siendo demasiado duro con usted, pero solo le estoy señalando sus propios errores. Sé que esto probablemente no es totalmente su culpa, pues la lista anterior me sugiere que usted ya viene de un pasado muy difícil. No me sorprendería si me dijera que su madre sufrió mucho con su padre. Usted está cargando una herencia familiar muy negativa. Y ese es su mayor problema, no su prometido.
Sí, hay cura para usted. Pero necesita buscar este tratamiento urgente. Hágalo sin demora, esta semana si es posible. Si no lo hace por usted, hágalo por su hijo. Quiero que comience este jueves la Terapia del Amor por usted misma. Olvide a este prometido y no piense en otra relación por ahora, hasta que resuelva estas cosas pendientes en su interior.
Más detalles sobre la Terapia del Amor aquí.
Extraído Blog Obispo Renato Cardoso
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