Todos hacemos contratos a diario, por ejemplo, si compramos algo, cuando viajamos, para alquilar, etc. Generalmente en los contratos las partes que intervienen pactan sus derechos y obligaciones recíprocas. Pero como excepción a esta regla general están los contratos por adhesión. Allí solo una de las partes impone las cláusulas del contrato mientras la otra parte solo puede prestar conformidad a la propuesta. No puede quitar ni agregar nada de lo que le ofrecen.
El contrato por adhesión se caracteriza porque no hay tratos previos ni negociación entre las partes. Simplemente una parte contratante redacta una oferta en determinadas condiciones y la otra parte solo puede aceptarlas o rechazarlas, no puede cambiar las condiciones.
Todos firmamos contratos por adhesión, por ejemplo, al solicitar los servicios de teléfono, TV por cable, luz, gas, seguros y medicina prepaga. Estas empresas no nos preguntan si estamos de acuerdo con los términos del contrato porque será igual para todos los que quieran contratar el servicio. Si no nos gustan, salvo que sean ilegales, lo único que podemos hacer es negarnos a firmar y no contar con esos servicios. Pero hay servicios como la luz y el gas que son esenciales y estamos obligados a adquirirlos, ya que la mayoría de las veces hay un solo prestador del servicio.
En la actualidad se utiliza con más frecuencia este tipo de contratos por adhesión por la necesidad de la rapidez en las contrataciones que exige la vida moderna.
Grandes empresas elaboran contratos por adhesión con cláusulas abusivas, menoscabando los derechos de los usuarios. Por ello se redactó la Ley 24240 en defensa de los consumidores.
Ante reclamos de usuarios, esta ley anula solo las cláusulas abusivas del contrato firmado, dejando vigente las restantes. Por ejemplo si resulta muy difícil el cumplimiento de una garantía o se exige al comprador pagos supletorios para la entrega de un bien adquirido.
Recuerde que es conveniente consultar, asesorarse y analizar con algún profesional de su confianza todas las cláusulas del contrato de adhesión antes de firmarlo para evitar posibles inconvenientes a futuro.
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