Jesús llegó a la reunión de los Casos Imposibles buscando su sanidad, hacía treinta años que sufría debido a una hernia. Puso su fe en acción y al participar de la reunión fue libre de esa hernia. El Dios de lo Imposible lo liberó de ese sufrimiento que lo afectó por tres décadas. “Fui sanado de la hernia ahora mismo, no tengo nada”, afirma.
María se acercó a la reunión de los Casos Imposibles buscando una solución para los frecuentes ataques de epilepsia que sufría.
“Hacía diez años que sufría con eso, tomaba medicamentos, pero seguía teniendo ataques, cada vez eran más seguidos. Participé con determinación de la cadena de sábados y fui curada de la epilepsia”, cuenta.
Reunión de los Casos Imposibles, todos los sábados a las 8, 10, 15 y 19hs en Av. Corrientes 4070 – Almagro
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