Sergio participó de la reunión de los Casos Imposibles junto a Fabiana. A él le habían detectado un tumor en la cabeza, en el hemisferio izquierdo de su cerebro. Lo operaron del ojo tres veces, pero el cáncer se propagó produciendo metástasis y el médico les dijo que, por su ubicación, era inoperable. Como consecuencia, se le dormían el brazo y la pierna derecha, y todos los días tenía dolores de cabeza, incluso no podía caminar bien.
Él hizo un desafío con Dios, volvió al médico y le realizaron tomografías y resonancias, pero no encontraron nada. Los dolores de cabeza y los adormecimientos desaparecieron. “Ahora tengo una vida normal, gracias a Dios”, afirmó Sergio.
Susana Lazarte llegó a los Casos Imposibles con un problema de salud incurable: “Sufría con gastritis crónica. Tenía que vivir medicada, no podía comer prácticamente nada porque todo me hacía mal. Vivía hinchada y me dolía todo. Sufrí con eso por casi tres años, los médicos me dijeron que tenía que tomar medicación de por vida”, recuerda.
Sin embargo, participando de la reunión de los Casos Imposibles, Susana empezó a creer, a perseverar y gracias a Dios, hoy ve los frutos de su actitud: “No tengo más nada. Me hice nuevos estudios que comprueban mi sanidad, como de todo y no me hace mal”, finaliza feliz.
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