Podría haber sido un baile entre la madre y el hijo en el glamuroso Trump International Golf Club, en West Palm Beach, en Florida, Estados Unidos. Pero para el novio Luke Rheault fue la última oportunidad de proporcionar a su madre Rebekah un momento mágico de felicidad. Un año antes de la ceremonia de Luke, Rebekah fue diagnosticada con Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), una enfermedad degenerativa del sistema nervioso que provoca la parálisis de los músculos del cuerpo.
Luke no sabía cuánto tiempo tendría al lado de su madre, por eso decidió sorprenderla sacándola a bailar en su casamiento, aun sabiendo que cualquier movimiento para Rebekah parecía imposible. Entonces, Luke, dócilmente, decidió arrodillarse al lado de la silla de ruedas de la madre y emocionó los invitados.
Vea el video y vea de cómo fue ese momento:
Luke y la novia Kristeena en noviembre de 2008, pero hasta este año el video formaba parte de tan solo un recuerdo personal de la pareja. Fue cuando Kristeena decidió compartirlo en las redes sociales y le impresionó la cantidad de visualizaciones.
“Quería que mi madre se sintiese muy especial en cada minuto, entonces di mi mejor y no paré de sonreírle. Pero en ningún momento pensé que sería nuestra última oportunidad juntos”, recordó Luke.
Kristeena contó que este fue el momento más emocionante del que ella había sido testigo. “No había nadie que no estuviese emocionado. Las lágrimas comenzaron apenas Luke se arrodilló. La hijita de Luke tampoco se contuvo y abrazó a los abuelos al final del baile”, detalló la novia.
Rebekah murió menos de un año después de la ocasión. Y recién ahora Luke vio el baile completo y se sintió muy emocionado con esos recuerdos maravillosos. “Nunca me consideré un “hijito de mamá”, pero siempre valoré todo lo que ella hizo por mí. Crecer aumenta el poder de esos sentimientos dentro mío”, afirmó Luke.
Honra a los padres
Dicen que todo buen hijo siempre será un buen marido y, consecuentemente, un buen padre. Como vimos en el video, Luke, probablemente, solo reprodujo en público el ejemplo del hijo que ya era. Dios valora tanto el tema de honrar a los padres que incluyó ese principio en los 10 Mandamientos, instituidos por Él: “Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la tierra que el Señor tu Dios te da.” – Éxodo 20:12
Esa fue la primera promesa en los Estatutos que Dios estableció. ¿Usted ya se detuvo a pensar lo cuán esencial es cuidar, respetar y honrar a las personas que lo trajeron al mundo? Aunque tal vez hoy, ellas no sean de la manera que usted siempre quiso. Pero si usted hace su parte siendo un hijo ejemplar, ¿su familia no verá algo diferente en usted? Recuerde que su comportamiento y sus actitudes pueden cambiar su alrededor.
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