Los noticieros, lamentablemente, están repletos de tragedias en las cuales niños son agredidos e incluso asesinados por las manos de sus propias madres. Solo en Nueva York, Estados Unidos, en los últimos 3 meses, tres bebés fueron arrojados por sus propias madres desde las ventanas de los apartamentos en los que vivían. Todas fueron arrestadas.
Pero, ¿qué lleva a una madre, que probablemente soñó con la maternidad, programó la llegada de ese bebé, lo llevó durante 9 meses en su vientre, lo sostuvo en sus brazos, lo amamantó, le dio calor, a cometer semejante crueldad?
Hay muchas discusiones sobre tener o no hijos, y las opiniones se dividen. Algunos defienden la idea de que todas las parejas deben tener por lo menos un hijo. Otros afirman que tener solo uno es lo mismo que no tener ninguno, y que, por lo tanto, lo más indicado es tener por lo menos dos. Pero también están los que son categóricos en afirmar que es mejor no tener ninguno.
Muchas personas no logran disociar a la mujer de la maternidad, para ellas esta es la misión femenina en este mundo. Pero el hecho es que, en sociedades tan desprovistas de amor, respeto y compasión, algunas parejas creen que no tener hijos se convierte en la mejor opción, la más sensata y la más inteligente.
Independientemente de la elección de cada uno, lo importante es ser conscientes de las consecuencias y las responsabilidades que cada elección conlleva y que tenemos que asumir.
Soporte necesario
Al optar por la maternidad, la mujer debe considerar su estado psicológico, emocional y económico, si de hecho está preparada para ser madre, porque un niño, indispensablemente, necesita de estos tres soportes para tener una formación mental, intelectual y física saludable. Cuando no se realiza este autoanálisis, la seguridad de ambos, madre e hijo, es puesta en riesgo.
En el caso de estas madres de Nueva York. Todo lo que sabemos es que fueron arrestadas. Pero, tal vez, hasta la ocurrencia de estos hechos, ellas fueron consideradas madres cuidadosas, atentas y amorosas. En ese caso, ¿qué las habría llevado a ese extremo?
¿Depresión postparto? ¿Desequilibrio emocional? ¿Crisis psicótica? ¿Un problema espiritual?
No lo sabemos, pero una cosa es cierta, para todos esos problemas existe una Solución.
Si usted está atravesando o conoce a alguien que esté pasando por una situación similar, que ha sido dominado por la tristeza, por la depresión, por el deseo de suicidio u homicidio y reconoce que necesita ayuda, acérquese a una Universal y reciba una orientación sobre cómo encontrar esa Solución.
También forme parte del Proyecto “Madres en Oración”, en el que madres de todos los lugares se unen con un solo propósito, bendecir a sus hijos.
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