No sólo son los hombres los que buscan el placer en la pornografía, sino que las mujeres también. Es lo que concluyó una encuesta para el futuro documental de la fotógrafa británica Amanda de Cadenet, de 43 años, junto a la revista Marie Claire, sobre la relación de las mujeres modernas con la pornografía. Inspirada en las experiencias de sus amigas, durante 2 años, ella entrevistó a casi 3 mil mujeres, la mayoría entre 18 y 34 años.
La encuesta demostró que una de cada tres entrevistadas mira pornografía por lo menos una vez por semana, ingresando, en su mayoría, a través de sus propios smartphones. El 66% de las mujeres nunca han visto pornografía con sus parejas, por otro lado, el 31% miran de vez en cuando, y solamente el 3% con regularidad. Alrededor del 30% de las mujeres afirmaron que miraban por lo menos algunas películas pornográfica un par de veces al mes, por otra parte el 31% mira cada semana.
Amanda observó que la relación de las mujeres con la pornografía es principalmente sobre su sexualidad, independientemente de su pareja. “La mayoría de las entrevistadas mira pornografía para encontrar lo que quieren y descubrir cómo satisfacerse a ellas mismas”, afirmó la fotógrafa al periódico británico Daily Mail.
La pornografía en la vida cotidiana
Para las entrevistadas, cuando se les pregunta por qué recurren a los contenidos pornográficos, las razones no son diferentes a la de los hombres, ya que el 73% admitieron que ese es un “camino para llegar más rápido al orgasmo”.
A pesar de que el 76% de las mujeres afirmaron que la pornografía no afectaba negativamente la vida sexual, el 56% se sentían avergonzadas por la manera como la industria trata a las mujeres en las películas y como un estereotipo negativo ha sido difundido en la sociedad. El 35% de las entrevistadas admitieron tener problemas en la vida íntima por la manera en cómo los hombres “parecen confundir la pornografía con el sexo en la vida real”. Y este ha sido el gran villano en muchos matrimonios.
Con la idea de “estimular” la relación, muchas parejas se inspiran en este tipo de contenido, sin embargo, no se dan cuenta de que eso solo es una “propaganda engañosa”, capaz de traerle peores consecuencias a la vida de la pareja.
“El hombre termina disminuyendo su capacidad de tener relaciones sexuales normalmente con su mujer, por estar condicionado a las otras mujeres virtuales. Él también termina siendo adicto a la masturbación (disminuyendo aún más su rendimiento con su mujer) y, finalmente, quiere utilizar a su compañera como objeto de placer, a veces obligándola a prácticas sexuales agresivas, en el afán de imitar a la pornografía”, observa Renato Cardoso, conductor del programa “The Love School”, de la cadena de televisión brasileña Red Record.
En su blog, Renato hace una propuesta a los hombres que ya no logran tener un buen desempeño sexual con sus esposas antes de mirar pornografía, y a las mujeres que se sienten presionadas en competir con la actriz pornográfica para experimentar algo diferente, para saber qué es haga clic aquí.
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