Dublín es la capital de Irlanda, un país europeo que posee muchas bellezas naturales y que proporciona calidad de vida a la población. A pesar de eso, el país tiene una gran cantidad de personas en situación de calle.
Según datos de la Focus Ireland (institución de caridad que ayuda a las personas sin techo) y del Servicio Central de Estadísticas (CSO), de los 4,5 millones de habitantes de Irlanda, 5 mil enfrentan o enfrentaron temporalmente la condición de no tener vivienda.
En el país las temperaturas bajas son comunes. En invierno, los termómetros no pasan los 8 grados y, debido a la lluvia y los fuertes vientos, la sensación térmica alcanza fácilmente valores negativos. Si para los que tienen un hogar ya es difícil enfrentar el frío, para los que no tienen es mucho peor.
Para ayudar a esta parte de la población, la Universal tiene el proyecto “Ángeles de la Noche” (Night Angels) en la ciudad. Todos los viernes, durante dos horas, los voluntarios recorren el centro de Dublín para ofrecer alimentos, ropa y la ayuda espiritual que ellos tanto necesitan.
Celio Rodrigues Sousa, de 43 años, es el responsable por el trabajo de los “Ángeles de la Noche” en la ciudad y cuenta las principales dificultades enfrentadas. “Muchos de ellos solo quieren ayuda económica, los alimentos o un lugar para estar. Eso el gobierno incluso se lo brinda, pero su mayor necesidad es cambiar de mentalidad y percibir que necesitan y pueden salir de esa situación.”
La cultura, el clima y las condiciones de vida del país son muy diferentes a la de Latinoamérica, pero los motivos que llevan a las personas a vivir en la calle son semejantes. El vicio en el alcohol y drogas, la depresión, la falta de apoyo familiar y problemas emocionales son algunos de ellos.
Muchos inmigrantes también son atraídos para allá, pues Irlanda posee el mayor salario mínimo de Europa. Así, buena parte de los habitantes de la calle está compuesto por extranjeros, que no consiguieron empleos, no hablan el idioma o no se adaptan al lugar.
“La mayoría de los mendigos tienen estudios y formación de alto nivel, pero, por más que le contemos nuestra experiencia de vida y le ofrezcamos ayuda, muchos no las aceptan. Es una lucha constante, pero no desistimos de ellos”, completa Celio.
La Universal mantiene diversos proyectos sociales y, por medio de sus voluntarios, actúa en varios sectores de la sociedad, con el objetivo de llevar la ayuda emocional, psicológica, material y, sobre todo, espiritual a los que la necesitan, en asilos, orfanatos, hospitales, presidios, comunidades, entre otros lugares.
Ingrese a los links a continuación y conozca esos proyectos:
Proyecto Rahab (Ayuda a las mujeres víctimas de violencia doméstica)
Proyecto T- Amar (Apoyo a las adolescentes embarazadas y madres solteras)
Proyecto Leer y Escribir (Alfabetización de jóvenes y adultos)
Ángeles de la madrugada (ayuda a los habitantes de la calle)
Las personas de la comunidad (obras sociales en las comunidades)
Grupo Caleb (Incentivo y ayuda a ancianos)
Fuerza Joven (Trabajo con los jóvenes)
¿Se identificó con alguno de estos proyectos? Entonces no pierda más tiempo, busque una Universal más cercana y obtenga informaciones de cómo ser voluntario. No se olvide “… Más bienaventurado es dar que recibir.” Hechos 20:35
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