Quien lo ve de lejos no dice que el joven de voz mansa, que incentiva a los jóvenes de la iglesia, es el mismo que maltrata a los padres y humilla a los compañeros en el trabajo. ¿Y qué decir de la joven atenta, que cuida a los niños con tanto cariño? Mirándola así, no parece que ella es deshonesta en la empresa o que se siente atraída por un hombre casado.
Usted debe conocer a personas con doble personalidad, que así como el camaleón, cambian conforme al ambiente en el que están. Y muchas traen consigo el título de “cristianas” hacen parte de grupos y siempre están en actividad en sus iglesias. Pero, ¿realmente se convirtieron a Dios o solamente se convencieron?
El cristiano “camaleón” puede ser aquel que tal vez no haga las cosas citadas en los ejemplos de arriba, pero tiene doble personalidad. En frente de un líder se presenta como un sirvo humilde y dispuesto a aprender. Sin embargo, delante de las personas que no poseen un título, siempre quiere sobresalir y hacer sentir inferior al otro.
Está también aquel tipo de persona que tiene un lenguaje y un modo de vestir para cada ambiente. Lo que suele decir o usar en la calle o en el trabajo no puede ser lo mismo dentro de la iglesia. Porque, ¿qué pensarán si lo ven así?
Para el obispo Edir Macedo, las características de un cristiano en la fe pueden ser dos. “El primero se adapta a cualquier circunstancia, se mezclan con facilidad. Ese tipo de persona tiene una fe, pero no la asume. Cuando está entre los cristianos, se muestra como hijo de Dios, pero cuando está entre los incrédulos, actúa como la carne desea. Por otro lado el segundo puede estar en medio de muchos, pero no se mezcla”, explica.
No basta que la persona diga que entregó su vida a Dios si las actitudes que tienen son contrarias a la fe que profesa. La Palabra de Dios afirma que solo conocemos un árbol por los frutos: “Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.” Mateo 7:17
“Unos viven en la prostitución, en la pornografía expuestas en internet, en el robo, etc. Cuando están dentro de la iglesia, se presentan como personas de Dios, pero cuando están lejos son personas diferentes”, destaca el obispo.
El Señor Jesús advirtió sobre el cristiano “camaleón”: “Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.” Mateo 7:15
Si usted reconoce que su modo de actuar no coincide con el carácter de un verdadero cristiano, no se engañe más, sea sincero, todavía puede reconciliarse con Dios. El paso más importante es reconocer y ser humilde para corregirse.
Si usted no sabe por dónde comenzar, ingrese aquí para conocer la dirección de una Universal cercana a su domicilio, y converse con hombres y mujeres de Dios.
[related_posts limit=”17″]
