Autor: Programador
¿Ya se imaginó el mejor plato del mundo sin sal?
El insensato, el impío y el murmurador
La Biblia Sagrada es un libro con referencias claras cuando el asunto es la prosperidad. Son varios los pasajes del Texto Sagrado que llevan al lector…
Un estudio revela que el 55% del pueblo israelita se inclina a votar por el fin de los conflictos con los palestinos
Las adversidades son, muchas veces, la señal de que vale la pena luchar contra estas en búsqueda de un objetivo.
El obispo Djalma realizó la reunión inaugural, de la que participaron más de 4500 personas
Si una oración hecha en la Tierra Santa tiene poder, imagine lo que sucederá con siete oraciones hechas por siete hombre de Dios…
El Señor Jesús nunca dijo una sola palabra en vano.
El hecho de que en Israel no exista una constitución es fundamental para que, aun siendo un estado laico, las leyes bíblicas influyan al gobierno. Esto sucede con muchas instituciones de ese país, el matrimonio es solo una de ellas. El documento que une a un matrimonio judío se denomina ketubá (foto), que significa “lo que está escrito” y el texto se escribe íntegramente en arameo. Aunque el hebreo sea el otro idioma oficial del país, no se escribe en hebreo porque esa fue la lengua hablada por los judíos durante el exilio de Babilonia, alrededor del 590 a.C; época en que fue ideada la ketubá por los sabios de la religión judaica. La ketubá es nada más y nada menos que un contrato matrimonial en el que constan las obligaciones de la esposa y del marido, con un valor elegido por el novio, que él tendrá que pagar en el caso que se divorcien, con pleno reconocimiento legal en Israel. El casamiento judaico sólo puede darse entre dos judíos, lo que demuestra cierto cuidado del estado para evitar incorporaciones y conservar la religión. Para casarse en Israel, los novios precisan reunir una serie de documentos que comprueben sus orígenes. [related_posts limit=”14″]
Si usted vive su vida intentando probarles a los que no creen que están equivocados, cometerá dos errores…