Los grupos Sisterhood y Mujer V visitan puntos turísticos en Tierra Santa y participan de una reunión especial con el Obispo Julio Freitas
Como forma de premiar a las participantes más destacadas en las tareas realizadas durante el año de 2011, los grupos Sisterhood y Mujer V seleccionaron una participante de cada estado brasileño y de diversos países para una excursión a Israel. Un grupo de 100 mujeres, entre pledges, sisters y big sisters, participaron de la caravana a Tierra Santa, que aconteció entre los días 7 y 14 de Enero.
En la ocasión realizaron el bautismo en el Río Jordán, donde diversas participantes se sumergieron en las aguas. Además de participar los puntos turísticos, como el Monte de los Olivos, la fuente de Gedeón, el Monte Carmelo, el mar muerto, el Monte de las Bienaventuranzas, el Mar de Galilea, entre otros lugares que, seguramente quedaran por siempre en sus memorias.
“Fue la mejor excursión que ya hice en Israel. Fue una bendición poder realizar la santa Cena en el sepulcro de Jesús, ya que el Pastor se atrasó y yo lo sustituí. Fue un momento importante. Una experiencia único, destaca 
Marilene da Silva, responsable en Santo Amaro y en Brás por el grupo Ester (Subgrupo de Mujer V para las participantes casadas).
Los Grupos
El sisterhood es un grupo formado por jóvenes de la Iglesia Universal del Reino de Dios. El mismo fue creado en diciembre del 2009, en Houston, Texas, en esa época solo eran 17 miembros. La idea de reunirlas en un grupo surgió de la escritora Cristiane Cardoso y de su Colega Evelyn Higginbotham, con el objetivo de rescatar la esencia femenina que Dios colocó en cada mujer. Al correr de los meses este grupo creció y las actividades se extendieron por varios lugares del mundo.
El grupo, Mujer V, lanzado en noviembre del 2010 en varios países, es un grupo hecho exclusivamente para mujeres por encima de los 30 años, maduras, solteras o casadas, con familias y carreras.
Salvación
Durante la visita del pasado domingo 8, el grupo participó de una reunión especial ministrada por el obispo Julio Freitas, en Telaviv. Cada una recibió un frasco de óleo perfumado de Ester que usaron para ungirse, para que Dios las usase poderosamente. También se realizaron oraciones por los familiares de todos los presentes.
El mensaje del Obispo fue basado en el texto Sagrado de Tito. Explicó que la salvación de Dios se ofrece a todas las personas, todos pueden ser salvos; pero; sólo serán salvos aquellos que aceptaren al Señor Jesús como Señor, porque aceptarlo como salvador es fácil, lo difícil es ofrecerse como siervo. Eso requiere que uno se niegue a sí mismo. No sólo a las cosas perjudiciales, sino también a otras que aparentemente, emocionalmente, sentimentalmente son agradables, a los ojos, a la carne, a su propio yo.
