El león (Panthera leo) es uno de los animales que más suscitan la simbología en todo el planeta – incluso en países que no son su hábitat. En la Biblia, es el personaje de pasajes muy importantes, como el encierro de Daniel en un pozo lleno de ellos y la lucha que Sansón emprendió con una de esas fieras, además de varios pasajes en que es usado metafóricamente – como el “León de la tribu de Judá”, que se refiere a Jesús.
Es el segundo mayor felino que existe, después del tigre. Algunos ejemplares machos pasan los 250 kilos, aún así tienen gran habilidad en sus movimientos y mucha fuerza, además de correr a una velocidad de hasta 80 kilómetros por hora. Es un cazador nato, peligroso para los seres humanos cuando siente que su ambiente está invadido.
Los leones salvajes existen en el día de hoy en África Subsahariana, en Asia y la India (donde están en vías de extinción, como ya sucedió en varios países). Hace aproximadamente 10 mil años, era el mamífero terrestre más difundido por el planeta después del ser humano.
Un león en cautiverio pasa fácilmente los 20 años de vida. Libre en la naturaleza, un macho vive entre 10 y 14 años – período más breve debido a las constantes luchas con otros ejemplares de la misma especie.
Su color varía de amarillo claro a marrón oscuro. Los machos de casi todas las subespecies – excepto una presente solamente en el Congo – representan una melena abundante con un mechón de pelo en la punta de la cola. Los leones blancos son una subespecie – no son albinos, por más que eso pueda suceder con casi todos los animales. Son más raros, por destacarse de la vegetación de la sabana, exclusivos de la reserva de protección ambiental Timbavati, en Sudáfrica.
Hoy, los leones encontrados en la naturaleza están concentrados en esas reservas, donde cazan otros mamíferos, como cebras, búfalos, antílopes y jabalíes. Hay historias hasta de elefantes solos derribados por grupos de leones.
Su fama de “rey de los animales” se debe al hecho de que el león está arriba en la cadena alimentaria de las especies terrestres del planeta.
Viven en grupos de hasta cerca de 40 individuos, la mayoría hembras. Ellas se encargan de la caza – a veces ayudadas por los machos – y cuidan a sus cachorros, mientras que los machos marcan el territorio y protegen al grupo. Sus colmillos destrozan carne y cuero con gran facilidad, así como sus garras. La fuerza de sus miembros es impresionante.
Los leones duermen entre 16 y 20 horas por día. Como gastan mucha energía, necesitan economizarla.
Extinción
Además de las áreas en que hoy aún habita libre, los leones eran encontrados en todo el Oriente Medio y en Europa. En Grecia, por ejemplo, la especie se extinguió en el siglo X.
El principal motivo de la escasez de leones en el mundo actual, como no podía dejar de serlo, es la caza.
“La sombra y la oscuridad”
Si un león está hambriento puede atacar a un ser humano, pero prefiere evitarlo, con raras excepciones. Una de ellas se volvió el más famosos caso de caza de humanos por esos grandes felinos. Sucedió en 1898, en Tsavo, en Kenia. Dos machos con más de 3 metros de largo (de la subespecie keniana sin melena) mataron a más de 140 personas en el transcurso de 1 año. Ellos entraban en las cabañas de los habitantes, muchos de los cuales trabajaban en la construcción de un ferrocarril inglés en el lugar, los mataban y arrastraban hasta su guarida, lo que causó mucho miedo en la región. Los animales mataron a varios habitantes. Cuando los operarios de la vía del ferrocarril pararon por 3 semanas, pidiendo más seguridad, los británicos le encargaron al militar angloirlandés John Patterson, excelente tirador, que cazara a los depredadores.
El militar se quedó muy impresionado por lo que presenció. Los dos felinos organizaban una estrategia muy complicada, demostrando mucha inteligencia, lo que hacía que los lugareños creyeran que no eran dos animales, sino seres sobrenaturales. El 9 de diciembre de ese año, después de muchos intentos frustrados, Patterson logró matar a uno de los leones. Al segundo lo mataron el día 29, costando casi la vida del soldado. Solo entonces las misteriosas muertes cesaron. En la caverna habitada por los animales, fueron encontradas centenas de huesos humanos, restos de ropa y objetos personales. El cuerpo de los “Leones de Tsavo”, como fueron conocidos, fueron atrapados y están hasta hoy expuestos en un museo en Chicago, en los Estados Unidos.
Fue tan impresionado con la historia Patterson, que lo transformó en libro, adaptado para el cine, en la película “The Ghost and the Darkness” (1996), con Val Kilmer y Michael Douglas.
Impuesto sobre la Renta
Debido a una campaña publicitaria sobre la acción fiscalizadora de la Reserva Federal en relación al Impuesto sobre la Renta, aplicada en 1979, el león, usado en la propaganda, termino siendo el símbolo de la institución.
En la Biblia
El león es símbolo, en varias culturas, de fuerza, poder, justicia, orgullo y autoconfianza. Presente en miles de capas y escudos de varias instituciones y lugares – como en un importante portón de la Ciudad Vieja de Jerusalén y en los estandartes de la tribu de Judá.
El mismo Mesías es comparado con un león:
“Y vi en la mano derecha del que estaba sentado en el trono un libro escrito por dentro y por fuera, sellado con siete sellos.
Y vi a un ángel fuerte que pregonaba a gran voz: ¿Quién es digno de abrir el libro y desatar sus sellos?
Y ninguno, ni en el cielo ni en la tierra ni debajo de la tierra, podía abrir el libro, ni aun mirarlo.
Y lloraba yo mucho, porque no se había hallado a ninguno digno de abrir el libro, ni de leerlo, ni de mirarlo.
Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos.”
Apocalipsis 5:1-5
Sansón, famoso por su fuerza y valentía, se topó con un león cuando iba a visitar a su futura esposa filistea. Venció al animal sin usar armas.
El joven Daniel era prisionero en Babilonia, cuando ese reino esclavizó a su pueblo, llevándoselo de Jerusalén. Fue seleccionado para servir al rey babilonio Darío, y le cayó en gracia al monarca por sus interpretaciones de sueños y sabiduría.
Con envidia por la cercanía de Daniel con el rey, otros miembros de la corte tramaron un plan en su contra. Influenciaron a Darío para que firme un decreto en el que, en el período de 1 mes, ningún dios fuera glorificado. Toda la gloria sería dada solamente al rey del lugar. Si alguien fuera visto adorando a otro que no fuera el gobernante babilonio, sería arrojado en un foso de leones cautivos y serviría de alimento de las implacables fieras.
Daniel no aceptó y, secretamente, se postraba en adoración a Dios en su habitación, tres veces al día. En una de las oraciones, fue descubierto, como lo planearon sus enemigos.
Darío se entristeció con la noticia, pero no podía faltar a su palabra ante los súbditos. Aún así, intentó librar a Daniel de la sentencia hasta que terminó el día. Presionado y triste, ordenó que lanzaran al joven, que tanto admiraba y quería, a los depredadores. El rey tuvo fe en Dios, por más que no lo adorara expresamente:
“Entonces el rey mandó, y trajeron a Daniel, y le echaron en el foso de los leones. Y el rey dijo a Daniel: El Dios tuyo, a quien tú continuamente sirves, él te libre.” Daniel 6:16
El rey no durmió la noche en que su estimado y admirado joven fue lanzado a las fieras en el foso, inmediatamente después cerrado. Darío no logró dormir esa noche. Por la mañana, fue al foso de los terribles felinos y llamó a Daniel, esperanzado de que Dios lo haya preservado de los colmillos y las garras de los animales.
“ Y acercándose al foso llamó a voces a Daniel con voz triste, y le dijo: Daniel, siervo del Dios viviente, el Dios tuyo, a quien tú continuamente sirves, ¿te ha podido librar de los leones?
Entonces Daniel respondió al rey: Oh rey, vive para siempre.
Mi Dios envió su ángel, el cual cerró la boca de los leones, para que no me hiciesen daño, porque ante él fui hallado inocente; y aun delante de ti, oh rey, yo no he hecho nada malo.
Entonces se alegró el rey en gran manera a causa de él, y mandó sacar a Daniel del foso; y fue Daniel sacado del foso, y ninguna lesión se halló en él, porque había confiado en su Dios.
Y dio orden el rey, y fueron traídos aquellos hombres que habían acusado a Daniel, y fueron echados en el foso de los leones ellos, sus hijos y sus mujeres; y aún no habían llegado al fondo del foso, cuando los leones se apoderaron de ellos y quebraron todos sus huesos.
Entonces el rey Darío escribió a todos los pueblos, naciones y lenguas que habitan en toda la tierra: Paz os sea multiplicada.
De parte mía es puesta esta ordenanza: Que en todo el dominio de mi reino todos teman y tiemblen ante la presencia del Dios de Daniel; porque él es el Dios viviente y permanece por todos los siglos, y su reino no será jamás destruido, y su dominio perdurará hasta el fin.
El salva y libra, y hace señales y maravillas en el cielo y en la tierra; él ha librado a Daniel del poder de los leones.” Daniel 6:20-27