Si el Señor Jesús nos pidió eso, es porque podemos lograrlo. Aprendé cómo es posible alcanzar Su patrón de perfección
“Por tanto, sed vosotros perfectos como vuestro Padre Celestial es perfecto”. Mateo 5:48
No intentes ser perfecto como tu padre terrenal, tu madre o cualquier otra persona que admirás en esta Tierra. No. Tu patrón de perfección debe ser Dios.
¿Creés que ya cambiaste lo suficiente? ¿Ya te convertiste en quien deberías ser? ¿Creés que ya alcanzaste la perfección? ¿Acaso el “evangelio de la gracia” puede anular las palabras del propio Señor Jesús?
Jesús nos llama a la perfección que no es basada en patrones humanos, sino en la plenitud y en el carácter de Dios.
Observá lo que Él dijo antes de este versículo:
“Pero Yo os digo: amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los Cielos; porque Él hace salir Su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tenéis? ¿No hacen también lo mismo los recaudadores de impuestos? Y si saludáis solamente a vuestros hermanos, ¿qué hacéis más que otros? ¿No hacen también lo mismo los gentiles?”. Mateo 5:44-47
Si tenemos que amar a nuestros enemigos, ¿te imaginás a los que no los son? Esa es la diferencia entre cristianos y “cristianos”. Solo aman a quien quieren y por eso no son hijos del mismo PADRE.