Trabajo, hijos, casa, marido, fiestas familiares y encuentros sociales. Son muchas tareas que, con el pasar del tiempo, se les sumaron a las mujeres. Sin embargo, en medio de ese torbellino, ¿cómo es posible disminuir el ritmo?
Para la psicóloga Aline Desiré, ese alivio depende mucho de la personalidad de cada mujer: “Algunas dejan de constituir una familia, de tener hijos, porque saben que tendrán que dedicarse al trabajo, y es exactamente eso lo que ellas quieren.”
Pero, hay otras que piensan y quieren tener una vida diferente. “Ella quiere constituir su familia y siempre evaluarán lo que vale la pena o no. Eso generalmente sucede cuando los hijos comienzan a necesitar más la presencia materna.”
Sin embargo, Aline destaca que hoy en día las familias tienen comportamientos distintos. “Hay muchas más mujeres viajando al trabajo que hombres. Ellos se quedan en casa y las mujeres se dedican más a la vida profesional.”
El escenario de actuación de la mujer en los días de hoy llegó a este punto porque la mujer posee características de poder hacer muchas cosas y termina absorbiendo muchas cosas. “La mujer probó que es hábil para hacer dos o más cosas al mismo tiempo y se olvida de cuidar de sí misma, porque todo y todos están en primer lugar, y ella se deja estar cada vez más. Quien convive con una de ellas se acomoda, por saber que ella realizará todo y de la mejor manera.”
La hora de parar
Sin embargo, llega un momento en que algunas pueden sentir la necesidad de disminuir el ritmo de todo, cuidar más de su bienestar, salud y, quizás, tener un tiempo mayor para estar con los hijos. “Yo siempre les indico a las madres que quiebren la rutina del hijo, como por ejemplo, salir más temprano del trabajo, buscarlo para pasear y tener un tiempo solamente para dedicarle a él.”
El problema surge cuando se necesita un tiempo para el cuidado personal, pues necesitará contar con el compañerismo de su marido. “Ella debe tener una buena relación con él, estar en sintonía, para que él entienda que necesita ese tiempo exclusivo para sí misma. Es por eso que el diálogo es siempre importante.”
En fin, para que la mujer pueda disminuir el ritmo, necesita saber administrar el tiempo. “Las personas están viviendo el futuro todo el tiempo, por eso están cada vez más ansiosas y manejan mal el momento. Ellas tienen que hacer ahora de la mejor manera”, finaliza la psicóloga.