Para conseguir un mayor rendimiento en un breve plazo, generalmente resulta necesario efectuar una mínima inversión y dedicar un poco de su tiempo. A modo de ejemplo se puede decir que hay que aplicar una mano de pintura en algunas paredes, limpiar profundamente aquellos sectores que se han utilizan poco durante el año, realizar pequeñas reparaciones, etc, en pos de lavarle la cara a su propiedad. Piense seriamente antes de efectuar importantes inversiones. Salvo que sean absolutamente necesarias, éstas no siempre son recuperables.
Efectúe un análisis detenido, con ojos críticos y, de ser posible, simulando que usted es el comprador/locatario de su propio inmueble.
Algunos aspectos a considerar son:
– Presentar un jardín ordenado, con el pasto cortado y con las plantas en buen estado.
– Ordenar los distintos sectores de su propiedad, guardando lo innecesario, disponiendo los muebles de la forma más armónica posible y procurando que no le resten amplitud a los ambientes.
– Realizar una limpieza general (incluyendo ventanas), profundizando la tarea en baños y cocina.
– Limpiar las alfombras.
– Reparar desperfectos tales como manchas de humedad, goteras, problemas con cañerías, baldosas faltantes, parqué deteriorado, etc.
Interpretando el Mercado
Las circunstancias económicas por lo general influyen en el mercado inmobiliario. Factores como acceso al crédito, estabilidad monetaria, crecimiento de la economía, coadyuvan a generar condiciones propicias para realizar operaciones inmobiliarias. Un mercado comprador caracterizado por más compradores que vendedores, se distingue por precios en alza y ventas en corto plazo. Por el contrario, un mercado vendedor en donde hay más vendedores que compradores, está caracterizado por precios en baja y plazos más largos para realizar las operaciones. También hay que tener en cuenta factores de estacionalidad, que influyen en determinado tipo de operaciones, como en el caso de las casas de “fin de semana”, que encuentran la mayor cantidad de interesados en las estaciones de primavera y verano.
Determinando el Precio
La fijación del precio es uno de los factores más importantes en la realización de una operación inmobiliaria. Es aconsejable imaginar un rango de precios de su propiedad y negociar dentro de ese rango. Ej: u$s 150.000 y u$s 135.000. Si el mercado se presenta como comprador el precio a solicitar debería fijarse dentro del valor más alto del rango, si por el contrario el mercado tiene las características de vendedor, la propiedad se debería ofertar dentro de los valores inferiores del rango. Fijar un precio excesivamente alto, bajo la presunción que los interesados van a realizar una contraoferta puede resultar erróneo, en muchos casos el comprador se inhibe de realizar una propuesta muy inferior al precio solicitado, o puede llegar a darse el caso en que la magnitud del precio lo haga desistir de la idea de ponerse en contacto con usted. En el caso en que tenga dudas sobre el precio a fijar, es aconsejable recurrir al asesoramiento de un tasador independiente.
Consiguiendo las Herramientas
Una inmobiliaria pondra a su disposición las herramientas que lo ayudarán a concretar la venta/alquiler de su propiedad. Usted podrá conseguir un Cartel de Venta adecuado, publicitar su propiedad en Internet con información completa, fotos y planos, etc. Todas estas herramientas lo acompañan en el camino hacia la venta/alquiler de su propiedad; el buen uso de las mismas lo ayudarán enormemente.
Recuerde que resulta fundamental difundir correctamente su intención de vender/alquilar su inmueble, por lo tanto realice una campaña seria y completa de difusión, la internet es un buen medio.