Las hormonas desempeñan diversas funciones en nuestro cuerpo, controlan la actividad de varios órganos y para que tengan un buen funcionamiento tienen que estar regulados. Sin embargo, eso no siempre sucede.
Nosotras, mujeres, sabemos que hay días en los que estamos más irritadas, somnolientas y de mal humor durante el síndrome premenstrual (SPM). Eso sucede por causa de la oscilación, común durante esa etapa, de las hormonas estrógeno y progesterona.
Otras alteraciones hormonales también ocurren en la pubertad, en el embarazo y en la menopausia. Sin embargo, hay muchos factores que pueden influenciar esas variaciones, como el tipo de alimentación y el estilo de vida.
La endocrinóloga Samanta Gomes Ferreira explica que es necesario prestar atención a los cambios de comportamiento. “Generalmente la mujer tiene más apetito un día y al otro no quiere saber nada con comer. O está muy feliz en un momento y al rato está peleando con todo el mundo. Si usted se conoce mejor, logrará evitar que las hormonas estén desordenadas”, afirma.
Vea a continuación algunos hábitos que pueden ayudar al buen desempeño hormonal. Con todo en orden, su piel se mantiene saludable, se siente bien todo el día y los efectos del síndrome premenstrual son amenizados. Si nota que sus hormonas continúan desniveladas, busque un especialista para que él evalúe las causas del problema.
Vea algunos consejos para controlar sus hormonas:
Alimentos azucarados- Modere el consumo de azúcar, pues la gran cantidad provoca resistencia a la insulina, que es la hormona responsable por llevar la glucosa a las células. Cuando eso sucede, además de que ocurre un desequilibrio hormonal, usted puede aumentar de peso y sufrir la temida diabetes.
Cafeína moderada-Evite consumir té, café y chocolate después del atardecer, ya que contienen cafeína, que aumenta la producción del la hormona cortisol, responsable por la agitación. Ingerir esos alimentos por la tarde o noche lo privará de una buena noche de sueño.
Haga ejercicios – Ellos aumentan la producción de endorfina, la hormona del bienestar. Por eso, además de perder unos kilos, usted está de buen humor cuando hace cualquier actividad. Sin embargo, practíquela moderadamente, pues el exceso puede perjudicar la producción de la hormona Ghrelina, que estimula el apetito. Lo mejor es buscar un profesional habilitado para orientarlo.
Duerma bien – Cuando dormimos también producimos una hormona llamado leptina, que regula el apetito. Pero, si tenemos insomnio, nos despertamos con voluntad de comer todo lo que tenemos en nuestra frente. “No se acueste muy tarde pero tampoco se despierte tarde para que su alimentación no esté desordenada”, explica la endocrinóloga Samanta Ferreira.
Estrés nocturno – Durante la noche los niveles de cortisol disminuyen para relajarnos. Sin embargo, si estamos estresados y ansiosos, esa hormona no disminuye como debería y, por eso, tenemos una noche más desordenada. Para que eso no suceda, opte por actividades más tranquilas al fin del día. Busque un profesional calificado para que lo ayude.
Evite dietas radicales – Ellas disminuyen la producción del estrógeno y desnivelan el ciclo de ovulación. Diariamente, prepare alimentos con menos sal y grasa, adopte el consumo de frutas y verduras, y coma carbohidratos moderadamente. Si necesita hacer cualquier tipo de dieta, busque un profesional del área.
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