La lucha de la cantante estadounidense Madonna, de 57 años, para recuperar la custodia de su hijo Rocco Ritchie, de 15, se está convirtiendo cada vez más en el centro de atención de la prensa mundial, pero no solo por la cuestión judicial implicada. Al parecer, a la cantante le gustaría acercarse nuevamente y recuperar el respeto y el cariño de él. Recientemente, en presentaciones en vivo, ella se emocionó y lloró cuando habló sobre su hijo con el público.
El adolescente – que vivía con la madre desde el divorcio de sus padres, en 2008 – decidió irse a vivir con su padre, Guy Ritchie, en Londres, Inglaterra, en diciembre del año pasado, cuando viajó para las fiestas de fin de año. La situación parece tan grave que Rocco bloqueó a su madre en las redes sociales y no quiere volver a vivir con ella en Nueva York, (Estados Unidos).
Pero, ¿qué puede provocar dicha situación y hacer que un adolescente deje de querer vivir, de ver e incluso de hablar con uno de sus padres?
Falta de diálogo
La relación entre padres e hijos se ve afectada cuando uno no logra o no se esfuerza para entender al otro. Muchas veces, los problemas surgen de la falta de diálogo y también debido a otros factores que quebrantan y rompen la convivencia familiar, como la separación de los padres, por ejemplo.
Durante la sección “Transformación Total de Padres e Hijos”, del programa “Escuela del Amor”, Marcelo Cristófalo y Luana Cristófalo contaron la historia de distanciamiento de padre e hija que sufrieron tras el divorcio.
A los 14 años, Luana recibió la noticia de la separación de los padres, en medio de los llantos de la madre. Para ella, que nunca había pensado en la posibilidad de ver a los padres separados, fue un trauma. Además de eso, ella estaba entre los comentarios de los familiares del padre y de la madre al respecto de lo que había sucedido. A partir de eso, ella, que ya no tenía una relación de amistad con el padre, se cerró completamente y no quería verlo más.
Marcelo no comprendía a la hija introvertida, que no sabía lidiar con la situación de la separación. Cuando ella estaba con él, pasaba todo el día callada y encerrada en el cuarto. Luana no le decía nada al padre sobre sus sentimientos, porque se sentía incomprendida, como si su opinión no valiera nada.
Según el conductor Renato Cardoso, la cumbre del problema está cuando se pierde el control y la conexión con el hijo, y ambos pasan a caminar en direcciones opuestas, con un gran vacío entre ellos. “A veces los padres no se dan cuenta del dilema y las luchas interiores que los hijos están batallando contra ellos mismos. Muchos padres se martirizan al perder la atención de los hijos, que están aislándose o dando oído a los que los otros dicen, pero bloqueando el contacto con el padre o la madre”, explica.
Marcelo, que admitió nunca haber sido tan dedicado a los hijos y que pensaba que ser padre era solo proveer las necesidades materiales, se demoró casi 1 año para percibir el comportamiento de su hija, y que él debería cambiar: “Estuve 8 meses sin ver a mi hija. A ella no le importaba si me visitaba o no. Hasta entonces, no había entendido que si yo estaba sufriendo con la separación y el alejamiento, ella estaba sufriendo mucho más.”
No acepte perder a su hijo
Por eso es tan importante que los padres e hijos se esfuercen para entender cómo funciona la dinámica de relación entre ellos. Según Renato Cardoso, los padres no deben aceptar perder a los hijos en ninguna situación, pero ambos, padre e hijo, deben actuar para no permitir que el problema de relación entre ellos aumente. “Padres e hijos deben luchar para conseguir una nueva visión, una nueva manera de lidiar con la situación”, afirma.
Marcelo reconquistó el amor y el respeto de su hija poniendo el diálogo inteligente en práctica. Comenzó a hacer eso mostrándose a disposición como amigo, apoyándola cuando ella lo necesitaba y escuchando lo que ella tenía para decir. Luana, notó que el padre estaba interesado y esforzándose para entenderla, entonces ella comenzó a comunicarse con él. Hoy, ellos son mejores amigos.
Si usted ha pasado por problemas en su casa y desea ayuda, acérquese a la Universal más cercana a su casa y participe en una reunión.
[related-content]