¿Qué es un deseo?
Es voluntad, querer, codiciar, apetecer o pretender.
¿No es eso lo que sucede en reiteradas ocasiones? Usted quiere algo, codicia y desea. Pero, ¿cuándo ese deseo trae realmente una realización?
Cuando usted responde primero a su necesidad.
¿Y qué es una necesidad?
Carácter de lo que es necesario.
La necesidad es aquello que va a traer primero la estabilidad, o, inclusive, las condiciones necesarias para la realización de un sueño. Sin embargo, muchos están más preocupados por los sueños, que en formar una base. La base es lo que afirma el edificio. Es lo que no está a la vista de todos, sin embargo, es lo que le da solidez.
Muchos quieren vivir en un edificio, pero no quieren construir las bases necesarias. Y ¿qué es eso? ¿No es una fe emotiva, egocéntrica, llevada sólo para satisfacer sus propios caprichos? ¡Y burra también! ¿Pues cómo será realizado ese sueño, si no existe base? Cualquier problema será motivo para derrumbar ese edificio.
Así, viven muchos. Están en la iglesia, pero no entienden la necesidad del Espíritu Santo. No entienden el motivo por el que necesitan del Bien Mayor. No entienden la necesidad de cuidar su estado emocional, que está lleno de sentimientos traicioneros y que hacen de la vida una carga. Estas personas quieren continuar con los problemas emocionales, y construir un edificio sin fundamentos. Pueden llegar a construir un edificio sin base, en la arena, pero jamás podrán concretar una realización estable y duradera.
Usted debe dejar de actuar por sus impulsos y comenzar a pensar en algo duradero, para que no tenga que comenzar siempre, todo de nuevo. Porque ningún tipo de aventura, trae nada en la vida.
(*) Texto extraído del blog de Viviane Freitas
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