A pesar de luchar, perdió dos negocios y el tercero estaba a punto de quebrar.Aunque trabajó para impedir el endeudamiento, no pudo evitar perder emprendimientos que costaron tiempo, sacrificio e inversión.
Cuando aparece un problema económico tras otro, se pierde la tranquilidad y, fundamentalmente, la fe que lo impulsaba.
Parece que no hay salida. La desesperación y la humillación que representa el fracaso económico incita a muchos a terminar con todo. Pero la historia de Celina Achura, quien también pensó en quitarse la vida, es la prueba de Usted va a salir y va a conquistar cosas aun mejores.
Vea su relato y de el paso para cambiar.
Participe este unes a las 8, 10, 16 y 20 hs. en Av. Corrientes 4070- Almagro o en el Cenáculo del Espíritu Santo más próximo a su hogar. Acceda y encuentre aquí, la dirección de todos los Cenáculos del país.