El sábado 3 de agosto se realizó el Clamor Mundial en el Templo de Salomón con la participación de obispos, pastores y sus respectivas esposas, de los países en donde hay una Universal. El objetivo del encuentro fue hacer un clamor en favor de los que vivieron el propósito rumbo al monte Moriah.
La fe en Dios:
Inicialmente, el obispo Macedo advirtió que Dios es grande, pero, al mismo tiempo, simple, y Se reúne con los que Lo buscan. Así como está escrito:
«Además os digo, que si dos de vosotros se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan aquí en la tierra, les será hecho por Mi Padre que está en los cielos», Mateo 18:19.
Por otro lado, el obispo enfatizó que la persona que camina con Dios vive en la verdad y, por lo tanto, tiene paz en su interior. Por eso, es importante que la persona deje la hipocresía y se arrepienta delante de Dios.
También recordó este pasaje bíblico: «Señor, ¿quién habitará en Tu tabernáculo? ¿Quién morará en Tu santo monte? El que anda en integridad y obra justicia, que habla verdad en su corazón», Salmos 15:1-2.
Para finalizar, el obispo añadió: «Para que ustedes se liberen de la mentira, tienen que decir: “Dios mío, ten misericordia de mí. Yo decido darle la espalda a la vida mentirosa que he vivido”, porque la mentira es el principio del mal. El que anda en la mentira anda en las tinieblas. Hoy pueden tener ganancias, pero más adelante lo perderán todo, porque están sirviendo al padre de la mentira, que es el diablo. Esto es tan serio que la persona no puede hacer una treta. No hay manera de que quieran los beneficios de la verdad si siguen la mentira, que es el diablo. Jesús es la verdad. Pauten sus vidas en la verdad todos los días».